El Gobierno regional se enfrenta a la crisis que atraviesan algunos de los sectores productivos y económicos de Cantabria adjudicando ayudas. Ante la inflación disparada y la crisis de suministro energético y de agua, desde el Ejecutivo de Revilla se ha decidido ‘regar’ con subvenciones a las empresas que peor lo están pasando. Frente a establecer un plan a largo plazo para que estos sectores puedan ser sostenibles y paliar aquellas deficiencias estructurales que soportan, la solución es entregar miles de euros de forma puntual.

Es el caso de los buques pesquero, por ejemplo. El Boletín Oficial de Cantabria (BOC) publicó ayer la resolución de la Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Pesca por la que se convocan las subvenciones correspondientes a 2023, por un importe total de un millón de euros, para inversiones en buques pesqueros con el fin de modernizar la flota pesquera de la región.

Cofinanciadas por el Programa Operativo del Fondo Europeo Marítimo y de Pesca (FEMP) correspondiente al periodo 2014-2020, estas ayudas tienen el objetivo de contribuir a la modernización de la flota pesquera cántabra mediante la financiación de inversiones a bordo de los buques que contribuyan a mejorar las condiciones de trabajo, la salud, la higiene y la habitabilidad en los mismos. También, a que reduzcan el impacto de la pesca en el medio marino, procuren el cumplimiento de las obligaciones de desembarque, la eliminación gradual de descartes y el aprovechamiento de las capturas no deseadas, la recogida en el mar por los pescadores de residuos tales como artes de pesca perdidos u otros desechos marinos y las inversiones a bordo para reducir las emisiones contaminantes, las auditorías energéticas y los sistemas de propulsión alternativos.

Divididas entre aquellas que se dirigen al grupo de buques de eslora total menor o igual de 18 metros y las que se dirigen al grupo de buques de más de 18 metros, estas ayudas no podrán exceder del 50% de los gastos subvencionables.

Ayudas a propietarios de busques pesqueros. Podrán ser beneficiarios los propietarios de buques pesqueros reglamentariamente acreditados que estén interesados en recibir alguna de las ayudas que engloba esta orden: salud y seguridad; limitación del impacto de la pesca en el medio marino y adaptación de la pesca a la protección de especies; protección y recuperación de la biodiversidad; mejora de la eficiencia energética; mejoras del valor añadido, calidad de los productos y utilización de las capturas no deseadas, y de mejora del control y ejecución.

Para poder optar alguna de ellas, los buques han de cumplir el requisito indispensable de tener una antigüedad de cinco años o más, tener el puerto base en Cantabria y estar inscritos y en alta en el censo de la flota pesquera operativa. Además, tendrán que mantener el puerto base en la región y el alta en el censo durante los cinco años siguientes a la fecha contable del último pago.

El plazo para presentar las solicitudes será de cuatro meses a contar desde el día siguiente a la publicación del extracto de la convocatoria de ayudas en el BOC y sólo se podrá presentar una solicitud por buque.

Podrán presentarse en el registro general electrónico del Gobierno de Cantabria o en cualquier de los registros habilitados por ley. El plazo de ejecución y justificación de las ayudas finalizará el 30 de octubre de 2023.

Ayudas a la ganadería. Otro de los sectores regionales que se verían beneficiados por las ayudas institucionales es el de la ganadería. La Consejería de Desarrollo Rural y Ganadería de Cantabria está «haciéndolo cábalas» para «intentar» habilitar más ayudas al sector ya que aunque la situación «ha mejorado» con las lluvias caídas estos días, las pérdidas por la sequía de este verano «van a ser cuantiosas», pues almacenamiento de forraje para el invierno «se va a tener que adelantar». «En estos momentos estamos ya haciendo cábalas y valoraciones para intentar ordeñar un poco más la vaca y, tras reunirnos con varias organizaciones agrarias, hemos decidido ayudarles a pasar este trago que han sufrido con la falta de agua en estos últimos meses», ha indicado este lunes el consejero, Guillermo Blanco, que ha negado que vaya a haber «insuficiencia alimentaria» en la región, ni de leche ni de carne.

Sobre las subvenciones, ha señalado que todavía no puede cuantificar el importe de las mismas, y tras recordar que el dinero «no es infinito», ha explicado que en su departamento están tratado de coordinarse para ayudar al conjunto del sector primario. «No sabemos en estos momentos (el montante). Debemos hacer acopio dentro de las diferentes direcciones» generales, ha precisado Blanco, quien ha subrayado el apoyo «constante» de la Consejería a los ganaderos, que han «sufrido» la pandemia del coronavirus primero y la guerra de Ucrania y el incremento de los costes de producción después, que para los profesionales del sector -ha incidido- ha subido «muchísimo» por el encarecimiento de los cereales.

Así, la Consejería ha aplicado un incremento «importante» y «extraordinario» el presupuesto destinado a esta actividad, de diez millones y medio de euros más respecto al ejercicio anterior, según ha remarcado su titular.