Se construyó en 1863 y está situado en el Monte Buciero, en Santoña, que domina la ciudad y el mar Cantábrico. Se ha convertido en uno de los principales destinos turísticos, no solo de Cantabria sino del norte, y la verdad es que es lógico.

El nombre del Faro del Caballo viene del Alto del Caballo, el lugar más elevado de la zona. Las vistas son impresionantes y desde el mar se puede ver la forma de cabeza de caballo. El edificio, se dividía en dos bloques, el primero para la vivienda del farero, ya demolida y el otro la torre del faro,de forma cilíndrica.

El camino hacia el faro no está asfaltado, es terreno escarpado, por lo que se debe ir con calzado deportivo y ropa cómoda ya que es una ruta por senderos con piedra y tierra y con desniveles. Durante el camino no hay fuentes, no hay bares, no hay baños, ni papeleras, no hay ningún tipo de servicio, es un monte. Además, se aconseja realizar la ruta con luz natural ya que no hay puntos de iluminación durante el trayecto.

El tiempo medio que se tarda en completar la ruta del Faro del Caballo es de unas tres o cuatro horas. Sin embargo, esto varía dependiendo de muchos factores como la forma física o las paradas que se realicen para contemplar el paisaje que rodea la ruta. Eso si, preparaos para las agujetas del día siguiente después de bajar y luego subir, sus 763 escaleras para librar el desnivel. Sino, la alternativa a ir andando es ir en barco, ya que también se puede acceder de esa manera si el mar lo permite, ya que hay un acceso que permite atracar barcos, utilizando en este caso una escalinata de 111 peldaños.

No está permitido bañarse, así como realizar saltos, ya que es peligroso por la zona en la que se encuentra y su acceso es bastante complicado. Pero eso no quita que no puedas disfrutar del paisaje desde esa zona, ya que muy pocas veces se tendrá esa oportunidad de contemplar esas vistas que no tienen nada que envidiar a muchos miradores.

Una ruta para realizar con amigos, familiares o incluso con mascotas ya que están permitidas siempre que estén atadas. El plan perfecto para un día. Pero recordad, id pronto porque a la gente le gusta, y mucho, el Faro del Caballo.