El Gobierno de Cantabria prorroga, a partir de este miércoles, durante diez días naturales -hasta el 12 de diciembre-, la limitación de entrada y salida de personas en el territorio de la comunidad autónoma y de los municipios en los que tengan fijada su residencia.

Así se dispone en el decreto del presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, que se ha publicado este martes en un Boletín Oficial de Cantabria extraordinario, que determina prorrogar los cierres perimetrales desde la próxima medianoche hasta el próximo sábado, 12 de diciembre.

Y se añade que esta medida podrá aplicarse nuevamente, modificarse o dejarse sin efecto a partir de que espire esta prorroga en función de cual sea la evolución de la pandemia.

Ayer, el consejero de Sanidad, Miguel Rodríguez, anunció que la prórroga del cierre perimetral de la comunidad autónoma y entre los municipios cántabros llegaría hasta el 16 de diciembre.

"De momento otros 14 días, hasta el 16 de diciembre", dijo el consejero cántabro, quien matizó que si se pudieran quitar esas restricciones antes, "se adelantaría", pero reconoció que no creía que eso pudiera ocurrir a la vista de los datos de contagios que registra aún Cantabria.

Hoy, martes, cuatro personas más han fallecido por la covid-19 en la comunidad autónoma, que ha vuelto a superar el centenar de nuevos casos positivos y ha incrementado la incidencia del coronavirus a 368 casos por 100.000 habitantes.

El decreto firmado este martes por el presidente de Cantabria fija que las limitaciones de movilidad vigentes desde el pasado 17 de noviembre, que expiraban la próxima medianoche, se extienden a los próximos diez días.

Esa medida se adopta después de que la Dirección General de Salud Pública, en su "informe de evaluación de riesgo y propuesta de medidas ante la situación epidemiológica", haya puesto de manifiesto que, a fecha de ayer, la situación de la covid-19 en Cantabria es de "riesgo extremo", según señala el decreto.

Desde el 6 de noviembre los indicadores sanitarios y epidemiológicos fueron ascendiendo hasta llegar al "nivel 4", el máximo de los niveles de riesgo establecidos.

A fecha 29 de noviembre los indicadores sanitarios (ocupación hospitalaria y ocupación de UCI) se han reducido muy ligeramente mientras que los indicadores epidemiológicos a 7 y 14 días (incidencia acumulada, incidencia acumulada en mayores de 65 años y positividad de las pruebas diagnósticas) muestran un decrecimiento más nítido, aún así el nivel global de alerta se mantiene en nivel 4".

Además, se realiza, en dicho informe, un análisis de la relación existente entre los fenómenos epidémicos y la interacción social, en el que se concluye que "en distintos países se han señalado las festividades tradicionales como eventos que favorecen la 'super-diseminación' de dichos fenómenos epidémicos entre las personas, principalmente por la movilidad geográfica asociada".

Y, al no haberse alcanzado un control de la transmisión comunitaria, el informe de Salud Pública -que recoge el decreto- propone la prórroga durante 10 días naturales (revisable en función de la evolución de los indicadores epidemiológicos y de impacto sanitario).