La Consejería de Industria ha hecho pública la solicitud de autorización ambiental integrada para una planta de biomasa en el complejo industrial de Solvay Química, ubicado entre Torrelavega y Polanco. La planta, con una capacidad eléctrica de 49,99 megavatios, implica una inversión de 127,6 millones de euros.

El proyecto contempla la construcción de una planta compuesta por tres turbinas de vapor a contrapresión, dos de las cuales tendrán una potencia de 15,706 megavatios cada una, y la tercera contará con 18,578 megavatios. Además, se incluyen equipos para la conexión a la red de distribución de energía, así como elementos auxiliares como un sistema de recepción, tratamiento, almacenamiento y alimentación de biomasa, sistemas de depuración de gases de combustión, y una subestación de intemperie y transformadores.

El Boletín Oficial de Cantabria (BOC) ha publicado los detalles de este proyecto, cuyo diseño básico fue presentado en octubre de 2023 para su evaluación. Se abre ahora un periodo de 30 días naturales para posibles alegaciones por parte de los afectados.

La planta de cogeneración con biomasa propuesta es termoeléctrica, destinada a generar electricidad mediante la combustión de materiales vegetales, como maderas y sus residuos. Este proyecto forma parte de la estrategia de descarbonización de Solvay.

Dado que la producción de carbonato y bicarbonato sódico en la planta cántabra de Solvay es intensiva en calor, actualmente el 80% de la energía térmica necesaria proviene de dos calderas de carbón, con un consumo anual de 260,000 toneladas de carbón. La nueva planta de biomasa se enmarca en el plan de descarbonización, que también incluye la sustitución de la mitad del consumo de carbón por una caldera de Combustible Derivado de Residuo (CDR), reduciendo las emisiones de CO2 en 150,000 toneladas. Sin embargo, este último proyecto está en espera de posibles ayudas estatales.