La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha proporcionado al juez de la Audiencia Nacional pruebas que señalan una "relación directa" entre José Luis Ábalos, exministro, y el empresario Víctor de Aldama, quien está siendo investigado en la Operación Delorme por presuntos delitos de organización criminal, tráfico de influencias y cohecho. Estas pruebas se centran en los pagos de comisiones ilegales en los que estaría involucrado Koldo García, asesor de Ábalos.

Según la investigación, Ábalos habría estado implicado en la adjudicación de contratos para la compra de mascarillas a la empresa Soluciones de Gestión y Apoyo a la Empresa SL, por un total de 50 millones de euros. Se ha descubierto que esta empresa tiene conexiones directas con Ábalos a través de una red de empresas y testaferros.

Una de las empresas vinculadas, Purdey Investment SL, tiene como administrador único a José Ángel Escorial Senante, quien fue detenido en relación con esta trama. Luego, esta empresa pasó a ser administrada por Daniel Sierra Monedero, que también está involucrado en Soluciones de Gestión y Apoyo a la Empresa SL y representa a Global Capadocia SL.

Además, se encontró que la empresa Brama Capital SL, anteriormente Global Barbola SL, fue administrada por Antonio Santiago Pérez y Guillermo Santiago Císter, antes de que Víctor Gonzalo de Aldama Delgado asumiera el cargo de administrador único. Esta empresa experimentó una ampliación significativa de capital antes de que De Aldama Delgado tomara el control.

Estos hallazgos sugieren una estructura compleja de sociedades y cambios en la administración que son consistentes con las tácticas utilizadas en tramas de corrupción para ocultar la verdadera identidad de los propietarios y facilitar el lavado de dinero. El trabajo meticuloso de la UCO ha sido fundamental para desentrañar estas conexiones y proporcionar pruebas al juez para su evaluación en el caso.