Pedro Sánchez ha confirmado que mantendrá su política de pactos con Bildu, a pesar de las críticas surgidas luego de que el candidato de Bildu a las elecciones vascas, Pello Otxandiano, se negara a llamar a ETA banda terrorista. Sánchez defendió esta postura argumentando que los acuerdos con Bildu se enfocan en medidas que benefician a la mayoría social del país.

En una rueda de prensa desde Bruselas, tras participar en un Consejo Europeo extraordinario, Sánchez explicó que su gobierno, como una coalición formada por dos partidos, el PSOE y Sumar, busca dialogar con todas las formaciones políticas para aprobar medidas que beneficien a la mayoría de la sociedad. Resaltó que su gobierno ha buscado acuerdos con diversas fuerzas políticas en el Congreso de los Diputados, excepto con Vox.

Sánchez también reprochó a Otxandiano su negativa a llamar a las cosas por su nombre, recordando que ETA no fue una banda armada ni un movimiento de liberación nacional, como afirmó José María Aznar en su momento. Asimismo, destacó que ETA ya no existe desde hace más de diez años y fue derrotada gracias a la unidad de todas las fuerzas políticas.

Esta declaración de Sánchez llega luego de que Alberto Núñez Feijóo desafiara al presidente a firmar ante notario que no pactaría más con Bildu hasta que esta coalición condene a ETA y contribuya al esclarecimiento de sus crímenes. La respuesta de Sánchez indica que no modificará su postura en cuanto a los pactos con Bildu.