La playa de Portio está situada en el municipio de Piélagos, protegida por grandes rocas que la rodean, algunas de las ellas sobresalen del agua. Es una playa de gran interés paisajístico y también geológico que dista más o menos a un kilómetro de la localidad de Liencres. 

Quien sea vecino de Piélagos, o municipios limítrofes, conoce bien esta hermosa playa. Pero quien no lo sea también, ya que es un arenal que existe desde que uno tiene memoria, y cuyo acceso nunca ha cambiado. Tiene unos 350 metros de camino asfaltado, y el último tramo, es un poco más abrupto, con tierra y piedras, y es por donde ya se debe acceder caminando. 

Antes de acceder a ese camino, en lo alto de la colina, existe y siempre ha existido, un prado donde los usuarios pueden dejar ahí sus vehículos, cuando el camino ya se queda totalmente ocupado por otros coches que aparcan en línea. Pero desde hace algunos días, este camino ha quedado inhabilitado para que nadie pueda aparcar. Los servicios municipales del Ayuntamiento de Piélagos, han pintado unas líneas amarillas a ambos lados del camino, indicando la prohibición de estacionar a lo largo de esos 400 metros de camino. Si lo haces, te multan. 

Al instante, vecinos, usuarios habituales y visitantes esporádicos han alzado la voz, y se han quejado de este hecho. No entienden, cómo de un día para otro, una vía pública de acceso a una playa pública se haya cerrado al público. Tras las primeras multas, de 80 euros, los usuarios se han quejado ante los agentes de Policía Local que cada día visitan la playa para multar a los bañistas que hayan dejado allí sus coches, pero éstos lo único que han podido hacer es remitirles al funcionario responsable del Ayuntamiento de Piélagos. 

Primeras multas

Tras las primeras multas los vecinos se han quejado y piden explicaciones a las autoridades.  Hasta ahora, el Ayuntamiento aún no ha emitido comunicado al respecto, pero se prevé debido a esta prohibición, el número de visitantes que normalmente vienen a esta playa en temporada alta, caiga de manera notable, para evitar multas “abusivas”, según cuentan algunos afectados.   La playa es semi-urbana, pero no tiene ningún tipo de servicio como aseos, duchas, papeleras. Tampoco tiene acceso a minusválidos, ni su acceso está señalizado, aunque si un puesto de vigilancia o socorrismo, pero solo en fin de semana y festivos. En definitiva, no ofrece ningún tipo de equipamiento, pero si te multan si aparcas en el camino de acceso. 

Está en un estado muy salvaje, aunque ahí radica su belleza y por lo que es una playa muy visitada. Lo que parece contradictorio es que en temporada alta el Ayuntamiento haya decidido prohibir el estacionamiento en la vía de acceso a la playa. Cabrá esperar cómo responden los usuarios que anuncian movilizaciones.