El consejero de Obras Públicas, Ordenación del Territorio y Urbanismo, José Luis Gochicoa, aseguró ayer que el pantano del Ebro «es capaz de aguantar dos o, incluso, tres años de sequía sin ningún tipo de problemas», y ha señalado que la disminución de su volumen causado por este fenómeno «se recuperará en invierno».

Gochicoa, que dirige el departamento responsable del agua en la comunidad, ha hecho estas declaraciones a preguntas de los periodistas sobre la medida que permitirá a los ganaderos abastecerse de los ríos de forma extraordinaria, tras presentar en el polígono de Candina de Santander un proyecto para evitar inundaciones.

«No va a afectar al abastecimiento. En primer lugar, esa autorización va condicionada a decir dónde se realiza la captación de agua y que no suponga menoscabo a las tomas de aprovechamiento de agua. El embalse del Ebro tiene una capacidad tremenda», ha sostenido Gochicoa, quien lo ve «una buena alternativa».

A su juicio, si un ganadero de la zona tiene necesidad de agua, «no tiene sentido que no la utilice porque, al fin y al cabo, va a volver al sistema y al pantano, de una forma u otra».

Por ello, ha insistido, son «medidas lógicas, normales» y que el Gobierno regional apoya. «No va a afectar en nada al abastecimiento de agua, que siempre es prioritario», ha incidido. Según ha dicho, aunque el pantano del Ebro esté al 50 por ciento, tiene 250 hectómetros cúbicos de agua disponibles, cuando «las necesidades puntuales en Santander y su Bahía pueden estar en torno a 5 hectómetros».

«Ni en 40 años seríamos capaces de agotar las capacidades del pantano, aún suponiendo que no lloviera nada», ha asegurado.

El consejero ha recordado que hay algunos embalses que están preparados para recoger agua de lluvia en invierno, utilizarla en verano y quedarse a cero al finalizar el año, pero no es el caso del pantano del Ebro, al que ve «capaz de aguantar dos o, incluso, tres años de sequía sin ningún tipo de problemas». Si ahora está bajando más de lo normal su caudal, ha explicado, es porque este año hay «una especial sequía», pero ha abundado en que son «volúmenes muy importantes de agua, que nada tienen que ver con lo que capta Cantabria para poder abastecerse». «Y que se recuperará en invierno», ha apostillado.

BLANCO DESCARTA CORTES DE AGUA

Por su parte, el consejero de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Guillermo Blanco, ha descartado que, de momento, se vayan a producir cortes de agua en los municipios de Cantabria porque, según ha asegurado, el suministro está garantizado por la Autovía del Agua.

«Entendemos que no va a ser necesario», ha subrayado Blanco, a preguntas de los periodistas en la visita a una bodega en Guriezo, y ha pedido, al mismo tiempo, un consumo «responsable» de agua a los cántabros.

El titular de Desarrollo Rural ha explicado que Cantabria no es ajena a la situación de sequía que está soportando todo el país y ha recordado que el Gobierno regional dispone de hasta 18 camiones autobombas para llevar agua a aquellas localidades o colectivos que lo necesiten, como pueden ser los ganaderos.

Además, Blanco ha puesto en valor la autorización de las tres confederaciones hidrográficas que actúan en Cantabria (Cantábrico y Ebro) para que los ganaderos puedan hacer «extracciones puntuales» de los ríos previa autorización.

Además, Gochicoa, considera «normales» y «lógicas» cuestiones como la autorización a los ganaderos de la región para que puedan coger agua de los ríos y cubrir así sus necesidades en caso de sequía. La petición ha sido concedida y el Gobierno ha enviado a los 102 ayuntamientos cántabros las instrucciones a seguir para que ganaderos -y servicios de extinción de incendios también- puedan captar agua de los cursos fluviales y pantanos.

En este sentido, el responsable de Obras Públicas, Ordenación del Territorio y Urbanismo ha apuntado que ese permiso va condicionado a que se pida la captación y a que donde se realice no suponga «ningún menoscabo» hacia las tomas que existan de aprovechamiento de agua. Considera que es «una buena alternativa», sobre todo para los ganaderos y sus animales, ya que así no tienen que desplazarse a una estación de tratamiento de aguas o a un depósito de la red de abastecimiento «si tienen un río más cercano» del que poder suministrar directamente.

Para finalizar, ha recordado que es un embalse plurianual, es decir, que es «capaz de aguantar» dos años de sequía o incluso tres «sin ningún tipo de precipitaciones», y ha incidido en que se trata de «volúmenes muy importantes de agua» almacenada que «nada tiene que ver» con lo que capta Cantabria para poder abastecerse y que, en todo caso, se recuperará en invierno gracias al bitrasvase del Ebro y las cuencas del Besaya y el Pas.