Cantabria se enfrenta este viernes, 15 de marzo, a un fenómeno climático que tiene a los locales y visitantes al borde de sus asientos. La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha lanzado una predicción que presagia un día lleno de sorpresas, con nieblas misteriosas y lluvias fantasmales dominando el escenario desde el amanecer hasta el mediodía. 

Viernes, 15 de marzo: Cantabria amanece bajo un velo de misterio con intervalos nubosos que dan paso a una capa más densa de oeste a este conforme avanza el día. Las primeras horas del día podrían sorprender con brumas y bancos de niebla en zonas altas, añadiendo un toque de encanto al paisaje. Aunque las lluvias débiles se asoman tímidamente, la mayor parte del territorio disfrutará de una jornada mayormente seca. Las temperaturas se mantendrán estables, con un ligero descenso que no alterará significativamente el termómetro.

Sábado, 16 de marzo: El fin de semana se inicia con cielos que oscilarán entre muy nubosos a despejados, especialmente notable a partir del mediodía. A pesar de la ausencia de lluvias significativas, no se descartan heladas débiles en las cumbres, recordando a los aventureros la cautela necesaria en estos entornos. Las temperaturas experimentarán un ascenso moderado, especialmente en las máximas, prometiendo un día agradable para actividades al aire libre.

Domingo, 17 de marzo: La variabilidad continúa siendo la protagonista, con intervalos nubosos que podrían dar lugar a brumas y nieblas matinales en el sureste. La jornada dominical cierra con la posibilidad de lluvias débiles al oeste hacia el final del día, mientras que el resto de Cantabria disfrutará de un clima mayormente estable. Las temperaturas seguirán su tendencia ascendente, excepto en el litoral donde las máximas se mantendrán sin grandes cambios. El viento, más presente, podría traer rachas fuertes en el interior, sumando dinamismo a la atmósfera.

Resumen semanal: Cantabria experimenta una semana de clima cambiante, marcada por la nubosidad variable, brumas matinales y un suave ascenso en las temperaturas. Aunque las lluvias se mantienen tímidas, el ambiente se carga de frescura y dinamismo, invitando a disfrutar de la diversidad climática de la región. Con la naturaleza en constante cambio, cada día ofrece una nueva paleta de colores y sensaciones, recordándonos la belleza de adaptarnos y vivir el momento.