03.05.2024 |
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Renfe, «el tren bala» de Cantabria

ANABEL GONZÁLEZ, CANTABRIA

pasajeros cantabria
Renfe, «el tren bala» de Cantabria

Que el personal de la cabina de una estación de tren de Renfe tenga que hacerte un justificante porque en una media de 3 días por semana llegas tarde al trabajo es ridículo. Los trenes (por lo menos en Cantabria) tenían la fama de la puntualidad y el seguro de que siempre iban a pasar, hoy por hoy no podemos decir lo mismo, nos encontramos con que, sin previo aviso en las aplicaciones de horarios, suspenden el tren que vamos a coger dos minutos antes de que pase o directamente el tren no circula y no se da comunicación alguna. La mayoría de las personas que esperamos al tren a las 7 o a las 8 de la mañana, es para ir al trabajo, otros para citas médicas, para ir al colegio, etc.

Es indignante que tengamos que estar pendientes de si justo cuando tiene que pasar el tren lo cancelan. La bronca se la suele comer siempre el personal de la cabina de la estación, la gente está indignada. Lo mismo pasa con Adif, en general todas las cercanías funcionan mal. Estamos hablando de que pueden pasar entre 45 minutos y una hora de retraso en muchos casos y no en todas las empresas son tan comprensivos con sus empleados por los reiterantes retrasos provocados por los trenes. Un justificante pidió una pasajera para presentarle a su responsable, es surrealista.

A los ciudadanos no nos tiene que importar que Renfe tarde otros 3-4 años en traer trenes de repuesto, eso se tenía que haber hecho antes, con cierta antelación, ya que se han ido dejando morir las máquinas hasta tal punto en que pasa lo que nos encontramos a diario: no hay trenes. Si una empresa tiene la obligación de realizar un servicio público, como es Renfe en este caso, tiene que garantizar el cubrir ciertos horarios, evidentemente puede suceder que de vez en cuando haya averías, como en los autobuses, pero no 3 veces a la semana en varios horarios o incluso 4. ¿O acaso en las empresas si un empleado se va no contratan rápidamente a otro? Aquí tiene que ser lo mismo.

Si fuera por falta de dinero la tardanza de dichos convoyes, tampoco lo tiene que haber para soterrar las vías, ni en Santander, ni en Muriedas, ni en ningún lado, lo primero es poder desplazarse, la estética ya se irá viendo. También, el problema derivado de las averías es que “no hay repuestos”, según un operario de la compañía, por lo que se cancela un servicio para utilizar las piezas del tren y agregárselas a otro. Los trenes se van “parcheando” para ir tirando. ¿Y los usuarios? Solo hemos aspirado a 4 manifestaciones mal hechas en las que no había ni 10 personas, había más maquinistas participando que ciudadanos de a pie. Tendríamos que haber quemado las estaciones para que nos escuchen. Los ciudadanos pedimos que no se nos mienta ni se nos trate como a tontos, muchos dependemos de este servicio tan malo que se nos ofrece y tenemos la necesidad de coger todos los días a la misma hora el tren.

Renfe, «el tren bala» de Cantabria
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