Cantabria se vio afectada ayer por condiciones meteorológicas adversas, con intensas rachas de viento y la presencia de nieve en diversas zonas, lo que resultó en complicaciones significativas en la circulación por carretera y la vida cotidiana de los habitantes. Las autoridades advirtieron sobre la peligrosidad de las condiciones climáticas y emitieron recomendaciones para minimizar los riesgos asociados.

Las rachas de viento alcanzaron velocidades considerables en varias localidades. En San Roque de Riomiera, se registraron vientos de hasta 107 kilómetros por hora, mientras que en Alto Campoo se reportaron rachas de hasta 84 kilómetros por hora, lo que las convirtió en algunas de las más fuertes del país durante la jornada.

La presencia de nieve también representó un desafío para los conductores, especialmente en las carreteras principales y secundarias de la región. La carretera nacional N-621, en el tramo ubicado en Vega de Liébana, fue una de las áreas más afectadas, donde se requirió el uso de cadenas entre los kilómetros 121,7 y 131, limitando la circulación de vehículos de gran tamaño.

Además, en otras vías autonómicas, como la CA-643 San Roque de Riomiera-Puerto de Lunada, también se hizo necesario el uso de cadenas para garantizar la seguridad vial. El impacto de estas condiciones climáticas fue especialmente notable en la zona de Liébana, donde se emitió un aviso amarillo por nevadas que podrían acumular hasta 10 centímetros de espesor en un período de 24 horas, sobre todo por encima de los 900 o 1.000 metros de altitud. Esta situación no solo dificultó el tráfico, sino que también afectó a la actividad económica y a las actividades al aire libre.

Además de las carreteras, otros aspectos de la vida cotidiana se vieron afectados por el clima. En las zonas montañosas, las bajas temperaturas fueron evidentes, con temperaturas bajo cero, como en la zona de Coriscao, donde se registraron -1,7ºC. En Alto Campoo, las temperaturas rozaron los cero grados durante la madrugada, lo que implicó precauciones adicionales para los residentes y visitantes. Ante estas condiciones adversas, las autoridades recomendaron a la población tomar las medidas necesarias para garantizar su seguridad, como evitar desplazamientos innecesarios, circular con precaución en las carreteras afectadas y mantenerse informado a través de los canales oficiales de comunicación.

Sigue el en aviso amarillo por oleaje

La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha emitido un informe sobre las condiciones meteorológicas que se esperan para este domingo, 3 de marzo, en la región de Cantabria. Se prevén cielos nubosos o cubiertos con la posibilidad de lluvias débiles y chubascos a lo largo del día. Es importante destacar que estas precipitaciones podrían ser más intensas en la franja costera, donde ocasionalmente podrían ir acompañadas de tormentas.

Además de las lluvias, se ha emitido un aviso amarillo por riesgo de oleaje hasta las 12:00 horas del domingo. Se prevé una mar combinada del noroeste con alturas de 4 a 5 metros, acompañada de vientos del oeste que se intensificarán principalmente durante la madrugada, alcanzando velocidades de 50 a 61 kilómetros por hora (equivalente a fuerza 7 en la escala de Beaufort).

Las autoridades meteorológicas también advierten sobre la presencia de nevadas, especialmente en áreas montañosas, con una cota de nieve que oscilará entre los 500 y 700 metros, aunque se espera que suba a 800-1.000 metros a lo largo del día. Se prevén posibles nevadas significativas que podrían afectar el tráfico y las condiciones de conducción en ciertas zonas.

Ante estas condiciones meteorológicas adversas, se recomienda a la población mantenerse informada a través de los canales oficiales de comunicación, tomar precauciones al desplazarse por carretera y extremar la precaución en zonas montañosas-