Acusado de abusar sexualmente de una menor, de dieciséis años de edad.

Según el ministerio fiscal, el acusado, portero de un pub de Santander, “aprovechando que la menor se encontraba bajo los efectos de bebidas alcohólicas, procedió a entablar conversación con la misma, determinándola a que se introdujera con él en el almacén del establecimiento”.

Allí, “pese a la negativa de la menor, procedió a bajarle las bragas y penetrarla vaginalmente, hasta que finalmente la menor consiguió abandonar el lugar y regresar con sus amigas”.

A consecuencia de los hechos, señala la fiscalía que la menor “padeció una grave situación de temor y estrés, debiendo someterse a tratamiento psicológico continuado”.

Los hechos, que tuvieron lugar en agosto de 2021, constituyen, según el escrito de la fiscalía de julio de 2022, un delito de abuso sexual con acceso carnal, merecedor de una pena de seis años de prisión y de cuatro años de libertad vigilada.

Además, en concepto de responsabilidad civil, solicita el ministerio público que el acusado indemnice a la menor en 15.000 euros. En caso de que este no lo haga, subsidiariamente pide la fiscalía que se haga cargo de la indemnización el titular del pub en el que el acusado se encontraba trabajando.

Por su parte, la acusación particular que ejerce la representación legal de la menor, coincide en la calificación de los hechos realizada por la fiscalía, pero eleva la petición de pena a ocho años de cárcel y 5 años de libertad vigilada. La indemnización solicitada es la misma que la pedida por el ministerio público.

Por otro lado, el titular del pub, considerado por las acusaciones responsable civil subsidiario, niega esta condición ya que señala en su escrito de calificación que el acusado no mantenía relación laboral alguna con la sociedad titular del pub y que en el día de los hechos se encontraba en el establecimiento como mero cliente, por lo que “cualquier acto que pudiera haber realizado lo hizo bajo su única y exclusiva responsabilidad”.