Poco antes de las 9 de la mañana, Sánchez partió del Palacio de la Moncloa rumbo a Zarzuela, en un movimiento que, aunque no ha sido oficialmente confirmado por ninguna de las residencias oficiales, ha sido documentado por fuentes cercanas. Este encuentro ocurre en un contexto de profunda deliberación personal del presidente sobre su futuro político. 

Tras la reunión, el Rey se ha dirigido a Hoyo de Manzanares para visitar el Centro de Excelencia Contra Artefactos Explosivos Improvisados, una visita que pone de manifiesto las responsabilidades continuas del monarca a pesar de la tensión política actual. Se espera que el Rey no regrese a Zarzuela hasta pasadas las 11 de la mañana, después de la anunciada declaración de Sánchez.

Implicaciones de la Decisión de Sánchez

Si Sánchez opta por la dimisión, se activaría un mecanismo constitucional que obligaría al Rey a iniciar una ronda de consultas con los partidos con representación en el Congreso para designar un nuevo candidato a la presidencia del Gobierno, lo que marcaría la undécima ronda de consultas desde la proclamación del Rey en 2014.

El encuentro en Zarzuela se enmarca en una serie de comunicaciones previas entre Sánchez y el Rey, siendo la más reciente el pasado miércoles cuando Sánchez informó al monarca sobre su decisión de reflexionar acerca de su posición como presidente del Gobierno tras la controversia suscitada por las investigaciones a su esposa, Begoña Gómez.

Expectativa Nacional

Con la nación expectante, los detalles de esta reunión podrían ser cruciales para entender las próximas etapas del liderazgo español. La decisión de Sánchez no solo definirá su carrera, sino que también podría precipitar una reconfiguración significativa del escenario político en España. La dirección del PSOE y sus aliados aguardan ansiosos, mientras que la oposición observa atentamente, preparándose para cualquier desenlace político que esta jornada pueda traer.