TRIBUNALES
La Fiscalía de Cantabria pide 14 años por violar a su hijastra repetidas veces
El hombre, que será juzgado este jueves en la Audiencia de Cantabria, agarró en una ocasión a la joven de una muñeca y de un empujón la tumbó encima de la cama de su habitación.
14:29 21/05/22
La fiscalía pide 14 años de prisión para un hombre acusado de agredir sexualmente en varias ocasiones a la hija de su pareja, que tenía 18 años, en el domicilio donde convivían los tres.
Según el escrito de la Fiscalía, desde julio de 2019 hasta octubre de ese mismo año, el acusado aprovechaba cuando se quedaba en el domicilio a solas con la joven "para atentar contra su libertad sexual, obligándole a mantener relaciones sexuales".
El hombre, que será juzgado este jueves en la Audiencia de Cantabria, agarró en una ocasión a la joven de una muñeca y de un empujón la tumbó encima de la cama de su habitación.
A continuación, relata el escrito de acusación que "le bajó el pantalón mientras se desnudaba íntegramente y la penetró vaginalmente".
"A fin de evitar que gritara, le tapó la boca y le dijo ‘Como tu madre no me da un hijo me lo tienes que dar tú; como le digas algo de esto a tu madre, te pego", explica el ministerio fiscal.
Días después, en tres ocasiones, "persistiendo en su comportamiento, se dirigió al dormitorio de esta, colocándose encima de ella a la par que por la fuerza le quitaba la ropa y la penetraba vaginalmente".
En otra ocasión, cuando la chica salía de la ducha en albornoz, el acusado "la abordó, de modo que la tiró de un empujón en la cama y nuevamente la penetró vaginalmente en múltiples ocasiones durante una hora".
Finalmente, estando la joven con su madre acostadas ambas en la misma cama, "el acusado se tiró encima de ella y trató de quitarle la ropa, evitándolo la intervención de su madre".
Un día después de esta situación, la chica, que según el ministerio público padece ansiedad y estado depresivo con síntomas postraumáticos, presentó denuncia.
Los hechos constituyen a juicio de la Fiscalía, un delito continuado de agresión sexual con penetración, merecedor de una condena de catorce años de prisión, alejamiento y prohibición de comunicar con la joven durante dieciocho años, y libertad vigilada tras la salida de la cárcel de diez años.
En concepto de responsabilidad civil, el ministerio público considera que el acusado debe indemnizar a la joven con 24.000 euros por los daños morales causados.
La acusación particular, que ejerce la representación legal de la chica, se suma a la calificación y a la petición de condena realizada por el ministerio fiscal. ![Publicidad 171034]()
Según el escrito de la Fiscalía, desde julio de 2019 hasta octubre de ese mismo año, el acusado aprovechaba cuando se quedaba en el domicilio a solas con la joven "para atentar contra su libertad sexual, obligándole a mantener relaciones sexuales".
El hombre, que será juzgado este jueves en la Audiencia de Cantabria, agarró en una ocasión a la joven de una muñeca y de un empujón la tumbó encima de la cama de su habitación.
A continuación, relata el escrito de acusación que "le bajó el pantalón mientras se desnudaba íntegramente y la penetró vaginalmente".
"A fin de evitar que gritara, le tapó la boca y le dijo ‘Como tu madre no me da un hijo me lo tienes que dar tú; como le digas algo de esto a tu madre, te pego", explica el ministerio fiscal.
Días después, en tres ocasiones, "persistiendo en su comportamiento, se dirigió al dormitorio de esta, colocándose encima de ella a la par que por la fuerza le quitaba la ropa y la penetraba vaginalmente".
En otra ocasión, cuando la chica salía de la ducha en albornoz, el acusado "la abordó, de modo que la tiró de un empujón en la cama y nuevamente la penetró vaginalmente en múltiples ocasiones durante una hora".
Finalmente, estando la joven con su madre acostadas ambas en la misma cama, "el acusado se tiró encima de ella y trató de quitarle la ropa, evitándolo la intervención de su madre".
Un día después de esta situación, la chica, que según el ministerio público padece ansiedad y estado depresivo con síntomas postraumáticos, presentó denuncia.
Los hechos constituyen a juicio de la Fiscalía, un delito continuado de agresión sexual con penetración, merecedor de una condena de catorce años de prisión, alejamiento y prohibición de comunicar con la joven durante dieciocho años, y libertad vigilada tras la salida de la cárcel de diez años.
En concepto de responsabilidad civil, el ministerio público considera que el acusado debe indemnizar a la joven con 24.000 euros por los daños morales causados.
La acusación particular, que ejerce la representación legal de la chica, se suma a la calificación y a la petición de condena realizada por el ministerio fiscal.
