El fin de semana pasado, Madrid fue testigo de dos manifestaciones de gran relevancia: una convocada por el Partido Popular en protesta contra las concesiones realizadas por el Gobierno de Pedro Sánchez a los independentistas en la ley de amnistía, y la otra, organizada por la izquierda para expresar su solidaridad con Palestina y denunciar las acciones de Israel. En esta última manifestación, también se hizo presente un grupo reducido de la extrema izquierda regional de Cantabria.

La presencia de este grupo de cántabros en la manifestación ha generado atención, ya que su número era limitado en comparación con el total de manifestantes, pero su participación no pasó desapercibida. La marcha, que fue organizada por el Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP), ha sido objeto de controversia debido a las imágenes y consignas amenazantes que se observaron durante el evento. 

Las imágenes captadas durante la manifestación muestran a manifestantes encapuchados, el uso de botes de humo y consignas amenazantes, elementos que han suscitado preocupación entre los usuarios en las redes sociales. Un video en particular se ha vuelto viral, mostrando a varios manifestantes bailando con el puño en alto en una coreografía peculiar en el reconocido lugar del centro de Madrid, Cibeles.

Muchos de los comentarios en las redes sociales expresan inquietud sobre la posible apología del terrorismo durante la manifestación. Esta preocupación no está del todo fuera de lugar, ya que la marcha fue convocada por el Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP), una organización considerada terrorista por la Unión Europea.

La presencia de representantes de partidos políticos como Podemos, con figuras notables como Ione Belarra e Irene Montero, y de Izquierda Unida en la manifestación ha generado división en la izquierda española. No obstante, otras formaciones políticas y sindicatos, como Sumar y Más Madrid, Comisiones Obreras y UGT, optaron por no respaldar la marcha, destacando la polarización en la política española en relación con este tema.

La manifestación en Madrid, liderada por una organización considerada terrorista a nivel internacional, plantea interrogantes sobre la legitimación de grupos con un historial de violencia y terrorismo y ha provocado un debate intenso sobre la libertad de expresión, el antisemitismo y la responsabilidad política en la gestión de manifestaciones controvertidas.

El FPLP es considerado una organización terrorista por la Unión Europea, lo que ha generado dudas sobre la legitimidad de la manifestación. A pesar de las críticas y la polémica en torno al evento, este grupo de la extrema izquierda regional decidió sumarse a la protesta en apoyo a Palestina.

La participación de la extrema izquierda cántabra en la manifestación resalta la diversidad de opiniones políticas en la región en relación con el conflicto entre Israel y Palestina. Aunque su presencia fue minoritaria, su participación en el evento demuestra su compromiso con la causa palestina y su solidaridad con los manifestantes presentes en Madrid.

Este acontecimiento pone de manifiesto la complejidad de las posturas políticas en Cantabria y su conexión con movimientos y organizaciones afines a la causa palestina, a pesar de las críticas y la controversia que rodean a este tipo de manifestaciones.

La portavoz de Podemos, Isabel Serra; la secretaria general de Podemos, Ione Belarra y la aspirante a liderar la candidatura de Podemos a las elecciones europeas y exministra de Igualdad, Irene Montero.