Santander se adapta estos días a los nuevos límites de velocidad en vías urbanas derivados de la modificación del Reglamento General de Circulación (Real Decreto 970/2020) que entrarán en vigor este martes, 11 de mayo, en toda España, y que harán que en la mayoría de las calles de la capital cántabra no se puedan superar los 30 kilómetros por hora.

El concejal de Movilidad Sostenible, César Díaz, ha explicado el trabajo que está llevando a cabo el Ayuntamiento de Santander para hacer efectivos los cambios y mantener informados a los ciudadanos, con la instalación de nueva señalización, la modificación de las señales de velocidad actuales y mediante una campaña informativa y de sensibilización que se ha puesto en marcha este sábado y se reforzará en los próximos días.

El responsable municipal ha remarcado que es necesario que los ciudadanos conozcan los cambios y ha recordado que los nuevos límites de velocidad serán de 20 kilómetros por hora en calles semipeatonales que dispongan de plataforma única de calzada y acera, así como en zonas escolares o 30 km/h en vías de un único carril por sentido de circulación. Se deberá circular a 40 km/h en vías de dos o más carriles por sentido de circulación, excepto la avenida de la Constitución (S-20), que estará limitada a 50 km/h.

El Ayuntamiento ha iniciado la instalación de paneles luminosos en las principales vías de entrada a la ciudad, como son Marqués de la Hermida, El Empalme, Camarreal, Avenida de la Constitución, calle El Somo y Jerónimo Sainz de la Maza, que recuerdan la condición de Santander como Ciudad 30.

También, en colaboración con la concejalía de Protección Ciudadana, y a través de los responsables de la Oficina Municipal de Tráfico de la Policía Local, ya se ha comenzado la modificación de las señales de velocidad, retirando algunas que podrán aprovecharse en otras zonas e instalando otras con las nuevas velocidades.

Tal y como ha detallado, se van a modificar las más de 70 señales que avisan a los conductores de que se encuentran en zonas escolares, ya que pasarán a estar limitadas a 20 km/h.

LA MAYOR PARTE, A 30 KM/h.

Por otro lado, la gran mayoría de las calles de la ciudad, al tratarse de vías de un solo carril por sentido de circulación, pasarán a estar limitadas a 30 km/h, por lo que 

será necesario retirar la señalización actual de 40 km/h que se podrá aprovechar para señalizar las vías de más de un carril por sentido de circulación. Además, se modificarán las señales ubicadas en las calles semipeatonales, para indicar el nuevo límite de velocidad a 20 km/h cuando la calzada y las aceras se encuentran al mismo nivel.

Como ha recordado Díaz, desde el Consistorio se va a poner el foco también en transmitir a los vecinos los beneficios asociados a esta nueva normativa para conseguir una movilidad más segura y sostenible, garantizar un flujo de tráfico con menos atascos y congestiones, favorecer los desplazamientos sostenibles y mejorar la competitividad del transporte público.

«Los cambios en el reglamento de circulación permitirán reducir la siniestralidad y la emisión de gases de efecto invernadero, la contaminación acústica, pacificar el tráfico y apostar por medios más activos, saludables y sostenibles como la bicicleta o los desplazamientos a pie», ha asegurado.

CIRCULAR A MÁS DE 30. Díaz ha detallado que de las 718 calles de la ciudad, únicamente estará permitido circular a más de 30 km/h en muy pocas calles, como Marqués de la Hermida, calle Castilla, San Fernando, Los Castros o Hermanos Calderón, entre otras, las cuales tendrán una limitación de 40 km/h al disponer de más de un carril por sentido de circulación, mientras que  la Avenida de la Constitución (S-20) será la única vía que conservará el límite máximo a 50 km/h.

En unos 700 viales, y de acuerdo con la modificación del Reglamento General de Circulación, la velocidad estará limitada a 30 km/h; y en el resto, como son las calles semipeatonales y las ubicadas en zonas escolares, a 20 km/h.

Para el edil, Santander afronta estos cambios como «una oportunidad para hacer una ciudad más amable», siguiendo la línea de trabajo iniciada en mayo del pasado año tras el compromiso adquirido por el Ayuntamiento de convertirse en ‘Ciudad 30’.

«Con la pandemia hemos puesto en marcha nuevos proyectos para favorecer una movilidad cada vez más activa y beneficiosa para el medio ambiente y para la salud de los santanderinos», ha afirmado.