Tras una primera mitad de temporada que los vio dominar las redes rivales, el Racing de Santander ha entrado en un nuevo año con una inusual sequía de goles, una situación que ha sorprendido tanto a aficionados como a analistas deportivos. El equipo, que anteriormente se jactaba de ser el máximo goleador de LaLiga Hypermotion, ahora se enfrenta a la dura realidad de no haber marcado ni un solo gol en los primeros partidos de 2024.

Esta falta de gol se ha hecho patente en las recientes derrotas ante el Eibar y el Cartagena. En Ipurúa, el Racing sufrió un revés 2-0, mientras que en su propio feudo, El Sardinero, cayó ante el Cartagena con un desalentador 0-2. Estos resultados no solo han afectado la moral del equipo, sino que también han levantado interrogantes sobre su estrategia ofensiva.

La ausencia del goleador Juanca Arana, clave en el esquema táctico del Racing, ha sido un golpe duro. Arana, sancionado en el partido contra el Eibar y sustituido por lesión en el enfrentamiento con el Cartagena, ha dejado un vacío notable en la delantera. Su habilidad para desequilibrar defensas y su olfato goleador se han extrañado en momentos cruciales.

ROKO ESTÁ LLEGANDO

En un intento por revivir la chispa ofensiva, el Racing ha acogido la vuelta de Roko Baturina, quien, en su anterior etapa con el equipo, demostró ser un elemento diferencial. Sin embargo, en su último partido, incluso Baturina encontró dificultades para penetrar la sólida defensa del Cartagena.

El técnico José Alberto López se enfrenta ahora al desafío de reajustar su estrategia y devolver al equipo a la senda del gol. "Confiamos en la calidad y el talento de nuestros jugadores ofensivos", afirmó López, subrayando la necesidad de adaptarse y superar este inesperado obstáculo.

Con la segunda mitad de la temporada en marcha, el Racing necesita reencontrarse con su forma goleadora para mantenerse en la lucha por los puestos de honor en LaLiga Hypermotion. El equipo, plagado de talento y potencial, tiene ante sí la tarea de redescubrir su magia en el campo y demostrar que su sequía goleadora es solo un bache temporal en un camino hacia mayores éxitos.