27.04.2024 |
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Un calendario a trompicones

El RAcing pasará de jugar tres partidos en casi dos meses a disputar cinco en catorce días  n principio, entre el día 13 y el 27 se medirá a Badajoz, Dépor, Unionistas, Cultural y Real Unión

El Racing descansa hoy tras un segundo fin de semana consecutivo sin partido. / Hardy
El Racing descansa hoy tras un segundo fin de semana consecutivo sin partido. / Hardy
Un calendario a trompicones

Futbolísticamente hablando, el 2022 se está pareciendo demasiado al final del 2020 y el principio del 2021. Por aquel entonces, la competición avanzaba a trompicones, con continuos parones debido a positivos y confinamientos que eran continuados por acelerones en forma de semanas de tres partidos. A muchos les fue complicado adquirir así un ritmo de competición adecuado que les permitiera progresar y enseñar su mejor nivel. Nunca es lo adecuado para alcanzar la deseada velocidad de crucero, pero es lo que le está tocando al Racing desde que en Almendralejo pusiera fin a sus meses de fútbol más convencionales desde antes de la pandemia.

Ese partido en Almendralejo fue hace mes y medio. En concreto, se disputó el sábado 18 de diciembre. Hoy es seis de febrero y, desde entonces, el conjunto cántabro sólo ha disputado tres partidos. Y dos de ellos, para colmo, se celebraron en cuatro días. Ahora le está tocando administrar dos semanas de parón absoluto y, cuando vuelva a competir dentro de exactamente siete días, le toca afrontar cinco partidos en apenas quince días. De cero a cien en un abrir y cerrar de ojos.

Tras aquel partido en el campo del Extremadura saldado con un 2-4, un hat trick de Soko y una actuación espectacular de Pablo Torre, llegaron las vacaciones navideñas. El segundo fin de semana de enero, tras la festividad de Reyes, el Racing recibió al San Sebastián de los Reyes, pero para parar de nuevo una vez terminar la contienda. Y no debido a algo que tuviera que ver con la pandemia, sino por capricho federativo, para que todos miraran a Arabia Saudí, donde se estaba disputando una Supercopa que coge muy lejos a los equipos de Primera RFEF.

Fue después de aquellos quince días de parón inmediatamente posteriores a los provocados por la Navidad y el Año Nuevo cuando el Racing disputó dos partidos en apenas cuatro días, que son los que ganó a la SD Logroñés y al Racing de Ferrol por la mínima. Era esa una semana con tres partidos que se quedó en dos porque hubo que aplazar el envite contra el Deportivo. Ahí empezó esta pequeña travesía por el desierto que está atravesando el conjunto cántabro y que va a provocar que, cuando encuentre agua, se venga sobre sí un tsunami.

Primero pidió el Racing el aplazamiento contra el Deportivo por los positivos de Soko e Íñigo por peligro de que hubiera más. No los hubo, pero entonces no se podía saber. Ambos están ya recuperados y, en principio, no iban a estar disponibles para jugar contra la Cultural, pero ahora sí lo van a estar porque esta semana fue el equipo leonés quien pidió el aplazamiento al detectar cuatro casos de Covid en su caseta. Por eso hay que encontrar una nueva fecha, al igual que al partido contra el Deportivo. El Juez Único de Competición conminó en sendas actas de aplazamiento a acordar una lo más pronto posible una vez que los jugadores afectados estén recuperados. Por eso todo apunta a que el encuentro contra el equipo gallego será el miércoles día 16 y siete días después, el 23, será el duelo contra la Cultural en Los Campos de Sport.

Esto quiere decir que, a falta de confirmación, habrá dos semanas consecutivas con partido entre semana. Se juntarán así cinco partidos en quince días contra rivales que, para colmo, están entre lo mejor de la categoría. Será todo un puerto de montaña que comenzará el próximo domingo a mediodía contra el Badajoz, tres días después contra el Deportivo y el sábado siguiente en Salamanca contra Unionistas. La siguiente cita será contra la Cultural y el día 27 contra el Real Unión. Los nombres que hay escritos en ese listado están entre lo mejor del grupo, por lo que el acelerón que va a tener que dar el Racing tras mes y medio sin competir de manera regular va a suponer todo un examen que, además, puede marcar el futuro inmediato del equipo.

Cuando el equipo de Guillermo Fernández Romo retome la competición, se va a jugar muchas cosas. En función de cómo salga de esa serie de encuentros, decidirá si tendrá opciones de pelear por el primer puesto o si la prioridad será aferrar una plaza de playoff. Es decir, si va a mirar hacia arriba o hacia abajo. Todo ello, con partidos que apenas se van a poder preparar porque entre uno y otro apenas habrá tiempo para recuperar y viajar.

La hoja de ruta está marcada aunque, por otro lado, todos son conscientes de que caminan sobre el alambre, ya que nadie puede descartar que se pueda producir otro aplazamiento en el partido contra el Badajoz. Los positivos pueden aparecer en cualquier esquina y una vez que ha quedado fijado el precedente del Racing, que logró aplazar su partido con sólo dos casos, nadie puede dar por seguro que vaya a jugar el siguiente partido que tiene programado. Por ahora, tras tener que ser él quien pidiera no viajar a La Coruña, el conjunto cántabro vive estos días sin positivos después de haber recibido el alta tanto Soko como Íñigo. Los dos volvieron mermados al trabajo diario tras pasar la enfermedad pero lo bueno es que parece que se van recuperando.

Los entrenamientos han tenido que cambiar una vez que se confirmó que no se jugaría el partido contra la Cultural que estaba fijado, en un principio, para el día de ayer. Lo que hizo ayer el equipo fue desplazarse a Los Campos de Sport para disputar un partidillo a campo completo para, en la medida de lo posible, simular realidades de competición para que no se vea afectado el ritmo competitivo por el parón. Mañana descansarán los hombres de Fernández Romo para comenzar ya después, a partir del lunes, a preparar el encuentro contra el Badajoz de dentro de siete días a mediodía.

La intención del Racing será mantener la línea de resultados que quedó cortada por este último parón. Ganó los dos últimos encuentros sin merecerlo pero aferrándose al resultado. Su juego ha de ir a más pero, mientras lo encuentra, bueno será seguir contando partidos sin encajar. Y es que, lo positivo que tiene todo este parón es que el conjunto cántabro se va a presentar por lo menos al día trece de febrero sin haber encajado todavía ni un solo gol en el nuevo año. Quizá sea la primera vez que lo consigue. Algo bueno tenía que tener esta montaña rusa en la que se va convirtiendo la temporada para el Racing.

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