Las palabras de Pedro Sánchez durante su visita a Israel han desencadenado un conflicto diplomático con acusaciones de apoyo al terrorismo, resultando en la convocatoria de la embajadora española por parte de Israel. En este contexto, la oposición ha expresado su descontento con el presidente del Gobierno, destacando la gravedad de la situación.

Alberto Núñez Feijóo, líder del Partido Popular, ha condenado la actuación de Sánchez, calificándola como una intromisión inoportuna en un país en conflicto y acusándolo de dañar significativamente la política exterior española.

Ha señalado que la decisión de Sánchez, impulsada por la coalición con Sumar, va en contra de la posición mayoritaria de la UE y la OTAN, generando preocupaciones sobre la coherencia y la alineación internacional de España.

Santiago Abascal, presidente de Vox, ha lanzado críticas más intensas, tildando a Sánchez de presidente ilegítimo y acusándolo de favorecer al terrorismo y el golpismo. La agradecimiento de Hamás a las declaraciones de Sánchez ha llevado a Abascal a describir al presidente español como "una total vergüenza para España y para Europa".

Las redes sociales también se han convertido en un escenario para la condena de la oposición, que cuestiona la posición de España y exige una defensa más firme de la independencia judicial y la separación de poderes.