Ha habido que esperar prácticamente un mes, pero todo acaba llegando. Lo necesario a partir de ahora es demostrar que Pedreña ha llegado bien, manteniendo el buen nivel con el que finiquitó el mes de agosto y, por lo tanto, en disposición de aprovechar la oportunidad que se le ha puesto delante. En junio había que ser muy atrevido para vaticinar que la mejor trainera cántabra fuera a estar en septiembre peleando por ascender a la ACT pero es precisamente ahí donde está. Le quedan dos paradas, las dos paradas que no permiten segundas oportunidades. O se coge el tren o se marcha hasta el próximo año. Y un año es demasiado largo cuando se habla de remo. Más aún, para un club de Cantabria.

El guión a completar lo conoce todo el mundo de memoria porque hace mucho tiempo que la temporada de remo termina de la misma manera. Los playoff, tanto los que ponen en juego un hueco en la máxima categoría masculina como en la femenina, servirán como paso previo a las dos últimas regatas ligueras de la ACT hoy en Bermeo y mañana en Portugalete. Hay, por lo tanto, terreno para todos los gustos. La primera jornada habrá que sobrevivir a la mar y la segunda a la ría. No vale con dominar una sola superficie, sino que hay que demostrar rendir a buen nivel en las dos porque la modalidad no permite despiste alguno.

Pedreña se la va a jugar con San Pedro, Meira, Bueu e Isuntza. El primero fue el campeón de la ARC 1, los dos siguientes fueron el campeón y el subcampeón de la LGT 1 y el último quedó undécimo en la liga ACT, por lo que es quien defiende su plaza. Entre los cinco se jugarán dos pasaportes para remar el próximo año en la máxima categoría. Los trasmeranos, que fueron unos fijos en la misma desde su creación, perdieron su estatus en el 2014 y, desde entonces, han malvivido en la segunda división. Hasta el salto de calidad que dieron en el 2020. Entonces pasaron a ser ‘gallo’ del corral, lo que no les ha servido para volver.

La trainera de Marina de Cudeyo lo intentó por vez primera hace dos años pero naufragó. A buen seguro que de aquella experiencia tomaron apuntes y sacaron conclusiones de las que sacar provecho este fin de semana. Lo cierto es que el desarrollo del verano no ha podido ser más diferente al de entonces. Aquel año Pedreña quedó campeón de liga y ganó buena parte de las banderas que se pusieron en juego. Dominó la categoría desde el primer día y eso le hizo entrar en todas las quinielas para conseguir el ascenso. Sin embargo, en Bermeo fue cuarta y en Portugalete tercera. Las diferencias fueron mínimas ambos días, pero los detalles que lo decidieron todo cayeron en su contra. La gran diferencia en el mundo del deporte está entre quien es capaz de dar lo mejor de sí los días clave y los que no. Y aquel año pandémico los trasmeranos no acertaron.

tendencias opuestas. El dominio de Pedreña en el 2020 fue tan grande que sabía que iba a disputar el playoff desde julio. No hubo nadie que le apretara mientras que el resto de sus rivales se jugaron cosas hasta el último día. Eso ayuda a mantener la mecha encendida y es lo que ha tenido que hacer la ‘Pedreñera’ este verano, ya que ha tenido que pelear cada punto hasta la última palada. Como el año pasado, se la jugó en la última jornada en Bilbao y esta vez le salió bien, por lo que ha mantenido la máxima tensión hasta el final. Lo malo es todo el tiempo que transcurre entre el fin de liga y la cita de este fin de semana. En el fondo, buena parte del premio se habrá decidido en función de cómo haya gestionado cada uno todo este tiempo sin competición.

Cada equipo ha realizado una preparación específica, una especie de pretemporada para tener la posibilidad de activarse a la primera palada. Hoy no valdrá encenderse como esas grandes farolas que comienzan dando un poco de luz para, poco a poco, ir aumentando su intensidad hasta iluminar más que nadie. Tampoco ser un fluorescente que se apaga y se enciende antes de hacer su función, sino que hay que ser la bombilla que da lo mejor de sí nada más apretar el interruptor.

La historia de Pedreña esta temporada ha sido una historia de superación porque hace diez meses casi no tenía ni equipo y porque, aunque fue capaz de armar finalmente un proyecto competitivo, pronto perdió piezas llamadas a ser fundamentales, la última de ellas Alfonso Lanza nada más empezar la liga. En su complicado arranque liguero, incluso hubo una semana en la que temieron quedarse sin patrón, pero éste se mantuvo en la popa y, precisamente desde ese momento, todo cambió. A partir de aquella victoria en casa inició la trainera cántabra una remontada que le llevó a remontar lo que parecía imposible remontar.

Por eso Pedreña parece ahora un equipo que se ha colado en una fiesta a la que no había sido invitada. Lo ha hecho con los hombres justos, con apenas un cambio aunque sin variar apenas la alineación durante todo el mes de agosto. Todo aficionado se conoce de memoria la tripulación que, salvo sorpresa, se la jugará este fin de semana: Kewin Ruiz en la popa; Roberto Labrada, Edu Carriles, Luis Guillermo Conde, Álvaro Gago, Miguel Navarro y Kevin Vieira en estribor; Miguel Lado, Joseba Fernández, Asier y Sergio Alonso, Carlos García y Suso Hermelo en babor con Luis López en la proa. Todos ellos han conseguido llegar a la salida cumpliendo el primer gran objetivo, que es estar sanos sin que nadie se haya quedado por el camino estas últimas semanas. Y quieren premio gordo por ellos mismos, por el club, por su pueblo y, qué demonios, incluso por la reputación de un remo cántabro que se resiste a dejarse caer.

El primer capítulo será en Bermeo, en ese campo de regatas eminentemente táctico que tan difícil es de remar. En el 2020, cuando Pedreña fue cuarto, hubo sólo cinco segundos de diferencia entre el primero (Tirán) y el quinto (San Pedro). Eso no es nada cuando se habla de la mar. Por eso no se permite ni una sola mala palada y mucho menos un error. Salir hoy en cuarta o quinta plaza convierte en una quimera el intento de remontada al día siguiente, por lo que es fundamental mantener la pata dentro del cazo para tener la posibilidad de jugársela mañana en Portugalete.

El playoff se celebra a contrarreloj y se reparten puntos (de uno a cinco) en función de la clasificación. Los dos que más puntos tengan después de las dos jornadas, remará en la ACT el próximo curso. En el caso de que se produzca un empate, se suman los tiempos de los dos días. El orden de salida hoy se sorteará y mañana será en función de la clasificación de la prueba bermeotarra. Nada cambia. Todo es como siempre. Sólo queda controlar los nervios y encontrar la mejor versión desde la bajada de bandera, que se producirá en torno a las 18.10 horas, ya que la jornada comenzará con el playoff femenino a partir de las 17.40. Van a ser dos días de emociones fuertes y sólo queda disfrutar y sufrir.

La liga llega totalmente abierta a las dos últimas regatas

Se viene un fin de semana de emociones fuertes con la disputa de dos playoffs, con el dramatismo que este tipo de competiciones suele conllevar, y de las dos últimas regatas ligueras. Muchas veces, la liga ha llegado decidida a Bermeo pero en esta ocasión está todo abierto. En concreto, es el anfitrión quien llega en lo más alto de la tabla pero tiene a sólo tres puntos a su más inmediato perseguidor, que es Hondarribia. Por lo tanto, está todo por decidir.

Tanto es así, que es posible que ambos fuercen la posibilidad de que la última regata del calendario, que será la de mañana en Portugalete bajo el patrocinio de El Corte Inglés, se celebre a contrarreloj. Según se detalla en la normativa desde hace unos pocos años, en el caso de que entre el primero y el segundo haya sólo tres puntos o menos de diferencia antes de esa última prueba, ésta se celebrará a contrarreloj. Se busca así, en la medida de lo posible, rebajar la influencia de las calles. El campo de regatas de la ría siempre ha estado acompañado de polémica y debate y han querido reducirlo de esta manera.

Con todo, tanto la jornada de hoy como la de mañana comenzará con los playoffs y, en concreto, con el femenino, que es el que abrirá la veda. Será una doble jornada entre sólo Deusto, como tercer clasificado de la liga ETE, y Tolosaldea, el último de la EuskoLabel liga. El próximo año, ésta tendrá ocho participantes y ya tienen pasaporte Hondarribia e Hibaika como los dos primeros de la liga ETE y Cabo y Tirán, por Galicia. Chapela rechazó la posibilidad que se ganó en el agua mientras que Orio, Arraun Lagunak y Donostiarra seguirán en la élite.