La Selección Española Femenina conquistó su primera Copa del Mundo de la FIFA, pero la obtención del titulo mundial pasó a segundo plano luego de la bochornosa conducta protagonizada por Luis Rubiales, presidente de la Real Federación Española de Futbol (RFEF), durante la premiación en donde besó sin consentimiento a Jenni Hermoso.

Hermoso, sus compañeras de la Selección y el mundo del futbol esperaban que Rubiales renunciara a su cargo este viernes durante la asamblea extraordinaria de la RFEF; sin embargo, el directivo se negó a dimitir y por el contrario ofreció un discurso en donde se justificaba de sus actos, lo que provocó una mayor indignación.

Distintas voces se han escuchado respecto a lo ocurrido y Javier Aguirre, director técnico del Mallorca, fue uno más que lamentó los hechos ocurridos en la culminación del Mundial de Australia-Nueva Zelanda 2023 y la atención mediática que ha tomado Rubiales desplazando el logro deportivo.

"Pienso que estamos todos en la misma línea. Es una conducta reprobable (el beso de Rubiales a Jenni Hermoso) a todas luces. Lo que más tristeza te da es que esta noticia esté por encima de la verdadera noticia: que son campeonas del mundo", dijo Aguirre este viernes 25 de agosto en conferencia de prensa previo al duelo entre su equipo y el Granada.

Luis Rubiales roba la atención que merece el logro de las jugadoras

El estratega mexicano lamentó que el tema en boga sea las actitudes de Rubiales y no la actuación de las jugadoras españolas que fueron reconocidas por el Mundial que conquistaron.

"En vez de hablarse de Rubiales se debería hablar de (Irene) Paredes, de Cata (Coll) de Aitana (Bonmatí), la mejor del torneo, la mejor jugadora del mundo, que es española. O la pobre chica (Olga Carmona) que hace el gol y pierde a su padre. Son cosas que se quedan de lado", agregó.

España no tuvo un camino sencillo para conquistar su primera Copa del Mundo ya que en la Fase de Grupos recibió una goleada de 4-0 de parte de su similar de Japón; sin embargo, las españolas supieron reponerse y avanzar como segundas de su sector y superar la ronda de eliminación directa hasta colarse en la Final, un mérito que Aguirre reconoció, pero que lamentó la falta de apoyos.

"Le cascaron cuatro y es difícil que un Mundial te levantes después de eso, y yo he estado en cuatro mundiales. Las chicas españolas son campeonas del mundo y resulta que tenemos que estar hablando de otra cosa. Las pobrecitas no tienen portadas, ni patadas iniciales en los partidos, ni el aplauso de los aficionados en los estadios. Les preguntan por ese hecho y no por el título mundial y eso es lo que me perturba", sentenció.