Las alternativas basadas en sistemas de combustión constituyen una importante fuente de gases nocivos. Desde que un vehículo se pone en funcionamiento comienza a expulsar vapores derivados del propio combustible y de los aceites. Hidrocarburos, benzopiurenos, óxidos de azufre, monóxido y dióxido de carbono… Su impacto ecológico puede ser importante.

Las restricciones a este nivel han hecho que los fabricantes de vehículos se vean obligados a buscar alternativas y complementos que permitan la minimización de la huella ecológica. Cualquier modelo que no se adecue a las normativas vigentes no puede ser comercializado dentro del continente europeo. Pero, ¿cuáles son exactamente las piezas que permiten reducir el impacto de la combustión? Existe una amplia variedad y todas ellas pueden adquirirse a partir de proveedores especializados como DAPARTO en caso de que se produzcan síntomas de fallo. A continuación, te hablamos de ellas. ¡Toma nota!

Catalizador

Es uno de los elementos esenciales. Su incursión llegó a raíz de la validación de la normativa Euro 1 de 1992. Fue a partir de entonces cuando los fabricantes comenzaron a integrar este dispositivo de forma estandarizada dentro de un espacio intermedio del tubo de escape. Su principal función es la minimización de los gases contaminantes y su posterior transformación. El resultado es una disminución de hasta el 98%. Optar por un catalizador de coche es probablemente la alternativa más eficaz a la que podemos acceder en el mercado o, al menos, una de las más efectivas. Su dinámica se fundamenta en la reacción catalítica. En primer lugar hace una transformación del NO2 en nitrógeno molecular a través de un proceso de reducción. Más tarde, los hidrocarburos restantes y CO pasan a convertirse en CO2 y agua a partir de un proceso de oxidación.

Filtrado de los gases del combustible

La instalación de un filtro especial puede ayudar a neutralizar los vapores que se generan durante el proceso de combustión. En el caso de que el volumen de gases generado sea demasiado elevado estos filtros lo evacúan hacia el área del motor para que sean quemados.

Recirculación de los gases del cigüeñal

El cigüeñal es un elemento esencial dentro de los motores de combustión interna. Su estructura tiene la forma de eje y está integrada por contrapesos. También puede recibir el sobrenombre de eje motor o árbol de manivelas. En este punto se genera una gran cantidad de aceites nocivos fundamentalmente derivados del aceite. La instalación de un complemento puede redirigirlos hasta los cilindros para, a continuación, ser quemados.

Bomba de alta presión

Su instalación puede resultar beneficiosa a dos niveles. Por un lado, minimiza el impacto de emisiones al contribuir a la reducción de sus volúmenes. Por otro, puede convertirse en una fuente de ahorro porque, al final, el consumo es menor. Su funcionamiento se basa en la compresión del combustible llevándolo a un estado de presión constante. Como resultado, los inyectores lo terminan pulverizando directamente en los cilindros.

Bujías de precalentamiento

Aceleran el proceso de arranque y minimizan las necesidades de recursos durante la puesta en marcha del motor en frío. Su sistema se basa en el recalentamiento de la cámara de combustión. Gracias a ello, el consumo final se reduce significativamente y, con ello, el volumen de emisiones contaminantes.

Recirculación de gases de escape (EGR)

Las válvulas EGR permiten estabilizar la recirculación de los gases de escape dirigidos al colector de emisión. Como consecuencia, un gran porcentaje de los gases son reinsertados en los cilindros dando paso a un nuevo ciclo de combustión. El resultado es una minimización significativa en emisiones de hidrocarburos semiquemados.

Filtro anti-partículas (diésel)

Su incursión se debió principalmente a la normativa Euro 5 de 2009. A partir de este filtro es posible reducir significativamente las partículas sólidas de carbono o benzopirenos producidos por el proceso de combustión de diésel. Puede situarse en diferentes zonas aunque lo más común es encontrarlo junto al catalizador o, incluso, integrado dentro de él.

Trampas NOx

El alcance del catalizador es limitado y, en ocasiones, no puede erradicar completamente los gases de óxido de nitrógeno. La instalación de trampas NOx son dispositivos diseñados para captar estas partículas para neutralizarlas complementando las funciones de los catalizadores.

Sistema AdBlue

La normativa Euro 6 chocó frontalmente con los motores diésel. Como consecuencia, los fabricantes decidieron apostar por una alternativa basada en la reacción catalítica de las moléculas NOx mediante la inserción de un nuevo componente en el diésel. La nueva propuesta estuvo compuesto por urea diluida en agua y recibió el nombre comercial AdBlue.

Start-stop

Este dispositivo permite detener las emisiones tóxicas en aquellos puntos en que el vehículo se detiene. Su funcionamiento consiste en la interrupción del motor de combustión. Hoy es uno de los componentes más interesantes que existen en el segmento.

On-Board Fuel Consumption Meter (FCM)

De acuerdo con la normativa Euro 6d ISC-FCM el control del consumo de combustible constituye una prestación imprescindible. Desde su publicación, los fabricantes están obligados a implementar sistemas de medición precisos. Generalmente, funciona a través de un software que permite hacer una estimación tanto a nivel consumo de combustible (si es que hablamos de alternativas basadas en combustión interna) o energético (si se trata de modelos eléctricos).