El Partido Popular y el Partido Regionalista de Cantabria han firmado este viernes el acuerdo que permitirá investir presidenta de la región a María José Sáenz de Buruaga. La dirigente popular, que fue la candidata con la lista más votada el pasado 28 de mayo, quedándose a tres escaños de la mayoría absoluta, podrá gobernar en solitario como pedía en la campaña electoral.

La formación de Miguel Ángel Revilla, sobre la que vuelan sombras de corrupción, ya anunció tras los comicios que «no obstaculizaría» un gobierno del PP en solitario para que no entrara Vox en él. Esta ha sido desde el principio su línea roja para la abstención.

Los regionalistas plantearon un primer acuerdo que los populares rechazaron por ser un programa de gobierno completo y no de investidura, y ambos partidos se emplazaron a trabajar en un nuevo documento para alcanzar un pacto, que han firmado este viernes.

Un pacto que, según aseguró Alberto Núñez Feijóo, no influirá de ninguna forma en las investigaciones sobre el caso Carreteras que salpica al PRC. El presidente del PP señaló que si su partido conociera, desde el Gobierno de Cantabria, algún tipo de indicio delictivo que implicase al partido de Revilla, lo llevaría ante la Justicia.

Según ha indicado Buruaga en su comparecencia, se trata de «un acuerdo puntual de investidura», y no un pacto de legislatura o de gobierno, para favorecer un gobierno en solitario del PP, algo que, ha dicho, «no es tanto una exigencia del PRC como una voluntad coincidente de ambas formaciones políticas». Y eso es lo que queda recogido en la primera cláusula del acuerdo sellado en la región tras días de conversaciones.

«Este acuerdo no condiciona en absoluto nuestro programa de gobierno, no implica ninguna cesión», ha declarado la candidata popular, que ha apuntado, además, su intención de continuar con los proyectos impulsados por el Gobierno regional en esta legislatura y financiados con los fondos europeos, así como proyectos de infraestructuras.

Vox había insistido en su postura de «mano tendida» para llegar a un acuerdo con Buruaga, a quien había afeado que prefiriera «la continuidad» con Revilla que «la alternativa» con ellos. La candidata de la formación de Santiago Abascal, Leticia Díaz, había manifestado su intención de entrar en el Gobierno autonómico al considerar que supondría dar estabilidad. No obstante, a diferencia de lo que ha ocurrido en otras regiones como la Comunidad Valenciana, donde PP y Vox han alcanzado un acuerdo de gobierno, el PP ha optado por firmar un pacto con el PRC, que no quedará incluido en el Ejecutivo cántabro.EL PACTO "NO CONDICIONA"

 

LOS TIEMPOS

La líder del PP ha asegurado que esta firma "no condiciona en absoluto" su programa de gobierno, "no implica ninguna cesión y no supone ningún sobresfuerzo" porque todo lo que recoge forma parte de su "contrato con los cántabros".

Es un acuerdo para echar a andar un Gobierno del PP, ha explicado Sáenz de Buruaga, antes de recalcar que el PRC "no pide nada a cambio" como ha hecho Vox.

"Luego vendrá el día a día, la legislatura estará necesariamente marcada por el diálogo", ha reconocido Sáenz de Buruaga, que buscará "acuerdos puntuales en base a las coincidencias programáticas" sin "vetos, sin exclusiones y sin cordones sanitarios" porque no tienen mayoría absoluta.

Los regionalistas dejan al PP gobernar en solitario "sin ataduras de ningún tipo" por su "éxito electoral" y Revilla ha avanzado que tendrá a su disposición al PRC "para apoyar aquellas cosas que sean sensatas".

"Cuando lleguen los presupuestos, naturalmente, habrá que negociarlos, y en esa línea de colaboración estaremos toda la legislatura", ha incidido.

Revilla ha recalcado que piensan que es mejor un Gobierno del PP "solo que con compañías negativas" y cree que, más allá de facilitar su investidura, que se prolongue este apoyo "depende de muchísimas circunstancias", como las elecciones generales del 23J. "Lo que dure va a depender de muchísimas circunstancias, sobre todo por parte del PP", ha incidido.

Además, la presidenta del PP ha aclarado que este acuerdo "no ampara silencios ni protege conductas sospechosas", en referencia a las comisiones de investigación, que "nunca se ha pedido ni ha estado encima de la mesa" que no se convoquen, como también ha sostenido el líder regionalista, que cree que esa "falacia" de que el PRC no las quería ha salido "de los partidos que se sienten perjudicados" por este acuerdo.
 

La presidenta del PP pretende que la sesión de investidura sea "cuanto antes mejor" y le gustaría que fuera a final de mes.

A partir de ahora se negociará la constitución de la Mesa del Parlamento, que el PP quiere que sea "plural y refleje lo más posible la proporcionalidad y el reparto de fuerzas" de la Cámara, con lo que ha coincidido Revilla, quien ha recalcado que el PRC, como segunda fuerza más votada, será el primer partido de oposición la con él a la cabeza a sus 80 años.

 

LA PRIMERA PRESIDENTA DE CANTABRIA
 

Nacida en Suances el 4 de junio de 1968, María José Sáenz de Buruaga se convertirá en la primera presidenta de la comunidad autónoma.

Se licenció en Derecho por la Universidad de Cantabria en 1994 y sus primeros pasos en política los dio al año siguiente en su municipio, aunque no fue hasta 1999 cuando se dedicó en exclusiva a la actividad política.

Es diputada desde entonces y ha ejercido de portavoz de distintas áreas.

Además, ha sido secretaria autonómica del Partido Popular desde 2004 y vicepresidenta y consejera de Sanidad y Servicios Sociales del Gobierno de Cantabria durante entre 2011 y 2015, cuando el PP obtuvo mayoría absoluta con Ignacio Diego, al que sucesión como líder del partido en Cantabria.