27.04.2024 |
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Unas minas... Que dan para mucho, menos zinc

Dan para mucho, menos para dar zinc. Desde un proyecto para reactivar la actividad minera en este paraje natural, que quedó en nada, pasando por una Ciudad del Cine, cuyos promotores acabaron en prisión, para terminar ahora en un proyecto de recuperación ambiental por valor de 9 millones de euros, para crear un espacio de ocio para los cántabros

En grande, la mina de Reocín que nunca dio zinc, a la izquierda, Guillermo Blanco se reúne con representantes de Torrelavega y Reocín. Y en circular, inicio de los sondeos en la mina de zinc. / ALERTA
En grande, la mina de Reocín que nunca dio zinc, a la izquierda, Guillermo Blanco se reúne con representantes de Torrelavega y Reocín. Y en circular, inicio de los sondeos en la mina de zinc. / ALERTA
Unas minas... Que dan para mucho, menos zinc

Muchos han sido los proyectos presentados para explotar este paraje natural, desde que la mina dio de baja su actividad, pero a día de hoy, todos ellos se han quedado en ‘agua de borrajas’. Bien porque el proyecto era inviable técnicamente, bien porque lo era económicamente.

Hoy el Gobierno de Cantabria presenta otro proyecto, uno medioambiental, con el que pretende que este páramo se convierta en un gran espacio de ocio para los cántabros. La Consejería de Medio Ambiente del Gobierno de Cantabria se ha reunido con ayuntamientos y entidades implicadas en la restauración de las antigua mina de Reocín y la antigua cantera de Solvay en Cuchía, para solicitarles su colaboración en ambos proyectos, que han obtenido financiación de fondos europeos por importe cercano a los once millones de euros.

En concreto, el titular del departamento, Guillermo Blanco, ha mantenido un encuentro con representantes del Consistorio de Miengo, la Junta Vecinal de Cuchía, la empresa Solvay y la asociación SEO Bird/Life, a los que ha presentado la actuación para la restauración ambiental de la antigua cantera de Solvay, que será financiada con 2 millones de euros que el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico ha distribuido entre las comunidades para rehabilitar antiguos emplazamientos mineros. El objetivo del proyecto es completar la restauración realizada por Solvay y que en la última fase, hasta ahora, ha contado con la colaboración de SEO. Así, la idea es consolidar una área de alto valor ecológico que mejore la conectividad ambiental en la zona de la ría y favorezca el uso público y el conocimiento del patrimonio natural.

Por otro lado, Blanco ha convocado a representantes de los ayuntamientos de Torrelavega y Cartes para informarles del proyecto de restauración ambiental de terrenos que formaban parte de la antigua mina de Reocín, que será financiado con 8.893.341 euros procedentes también del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. Afectará a unas 100 hectáreas, para recuperar «un enclave señero» en la historia industrial de Cantabria como lugar de alto valor para la infraestructura verde prevista, al igual que la restauración de Cuchía, en el Plan Estratégico Ambiental de la Cuenca Saja-Besaya 2030, puesto en marcha por la Consejería de Medio Ambiente al inicio de la presente legislatura.

Veremos cómo se desarrolla este proyecto, que por el momento tiene el visto bueno de Europa.

Dos millones de euros para la cantera de Solvay y cerca de nueve millones para la mina de Reocín

El titular del departamento, Guillermo Blanco, ha mantenido un encuentro con representantes del Consistorio de Miengo, la Junta Vecinal de Cuchía, la empresa Solvay y la asociación SEO Bird/Life, a los que ha presentado la actuación para la restauración ambiental de la antigua cantera de Solvay, y con los ayuntamientos de Torrelavega y Cartes para informarles del proyecto de restauración ambiental de terrenos que formaban parte de la antigua mina de Reocín, que afectará a unas 100 hectáreas.

PROYECTOS NO EJECUTADOS

Desde 2017 hasta las elecciones de 2019, Miguel Ángel Revilla, con el entonces titular de Industria, estuvieron anunciando este proyecto fracasado

Uno de los proyectos que el Gobierno de Cantabria (PRC-PSOE) anunció a «bombo y platillo» y que finalmente ha quedado en nada, ha sido el de reactivar la industria minera en Reocín.

Se promocionó con «promesas de miles de empleos y enormes beneficios económicos», que generaron «falsas» expectativas y «todo quedó en un engaño» para los cántabros. Así de tajante se mostraba el diputado del PP, Roberto Media, el pasado mes de febrero, cuando volvía a interpelar en el Pleno del Parlamento, al Gobierno de Cantabria para conocer el desarrollo de los distintos proyectos de apertura de la Mina de Reocín, proyecto «estrella» del PRC donde, según los ‘populares’, «nada se mueve».

«La fe en las promesas de cualquier dirigente regionalista es un acto heroico. Rara vez se cumple alguna rutilante promesa que realizan en precampaña electoral con el fin de arañar unos votos. Los miles de puestos de trabajo que traería la mina, junto con las cantidades ingentes de dinero que se escondían en nuestro subsuelo, cambiarían la Comarca del Besaya y el PIB de Cantabria, según el presidente Revilla y sus consejeros. Han pasado varios años y la realidad es que, por desgracia, esas promesas son un claro ejemplo de un gran timo electoral», concluía el diputado popular.

La Ciudad del Cine, otro proyecto fantasma con sus promotores en prisión por estafa

Los impulsores de esta iniciativa, que contó con el apoyo del Gobierno de Cantabria, hablaban de una inversión de 600 millones de euros y 800.000 visitantes al año

El pasado mes de mayo, 15 años después de su anuncio, el Supremo condenaba a 3 años de prisión al promotor del proyecto por estafar a los empresarios implicados. «Es un proyecto de futuro y de infinitas posibilidades para Cantabira». Así presentaba Javier López Marcano en el año 2007, la Ciudad del Cine y de las Artes de Cantabria. Pero las cifras millonarias que manejaba esta propuesta nunca llegaron a cumplirse, ni tampoco los proyectos. La Ciudad del Cine y de las Artes de Cantabria se iba a ubicar en una finca de 130 hectáreas junto a la desembocadura del río Saja y se iba a convertir en un gran complejo de ocio, entretenimiento y formación en el que habría desde pabellones temáticos dedicados al cine a un centro de formación en técnicas cinematográficas, un área de cultura y arte y salas de cine, hasta un gran anfiteatro multiusos con capacidad para 2.000 personas, además de hotel, zona comercial y pista de hielo. Se proyectó, incluso, una residencia de actores.

Según el proyecto, sobre la antigua cantera primarían las zonas verdes y el arbolado autóctono, además de contar con varios lagos y una gran zona de dunas, que los promotores calificaron como ‘la nueva Alejandría del siglo XXI’.

Unas minas... Que dan para mucho, menos zinc
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