Las investigaciones siguen su curso, pero todo apunta a que unos rebaños de unas 300-400 vacas que se enviaron a Extremadura y otros lugares como Salamanca hace unos meses y que se retornaron a Cantabria hace unas pocas semanas, podrían ser el foco inicial de la propagación de la enfermedad en nuestra región, a la espera de los informes oficiales.

A día de hoy aún se pueden ver vacas pastando en fincas del municipio de Solares, y otras zonas de la región. Fuentes consultadas en el sector agrario afirman que ven vacas sueltas por algunas fincas de las zonas afectadas y «preocupados» se preguntan por qué la Consejería de Ganadería no ha actuado antes, conociendo el problema surgido hace un año y no se explican «cómo se ha quedado impasible al ver cómo se trasladaba ganado desde Extremadura y otros puntos del país donde había ya ganado enfermo».

Los ganaderos denuncian «falta de previsión» ante la expansión del brote

El primer comunicado del Gobierno de Cantabria fue el pasado 31 de agosto donde pidió a los ganaderos de la región que «extremasen las precauciones» por el aumento de casos en otras comunidades de la enfermedad hemorrágica epizoótica y de la lengua azul en el ganado.

Hoy sábado 9 de septiembre, tan solo 10 días después, la región sufre ya en 12 municipios la enfermedad y al menos 105 animales están infectados. No se transmite a humanos, pero puede provocar mortandad en el ganado vacuno, ya que no existe una vacuna autorizada en la Unión Europea.

El foco de la enfermedad hemorrágica epizoótica en Cantabria se encuentra localizado en Solares (Medio Cudeyo), según ha informado en un comunicado la Consejería de Ganadería.

Por ello, desde este departamento se está ultimando la programación de cursos de bioseguridad agraria para los ganaderos de esta comarca y alrededores con el fin de frenar la propagación de la enfermedad, que en Cantabria ha afectado, con datos de este jueves, a un total de 95 animales.

En cualquier caso, se mantienen activadas las medidas restrictivas que impone el Plan Nacional Zoosanitario, de tal manera que se limita el movimiento de los animales en toda Cantabria y se implementan medidas de desinfección del transporte de animales.

SOLARES, EL FOCO INICIAL. En el caso de la comarca de Solares y alrededores se pide a los ganaderos que aíslen y no hagan movimientos de los animales para no expandir el foco. Además, es obligatorio que los ganaderos cuenten con el certificado veterinario de desinfección de animales y de sus medios de transporte en vigor, así como el certificado veterinario de animales sin síntomas.

Según fuentes consultadas, rebaños trasladados de otras provincias de entre 300 y 400 vacas podrían ser el inicio de la enfermedad en nuestra región. Estas vacas se enviaron a Extremadura hacía 3 o 4 meses, debido al número tan elevado de ejemplares y la imposibilidad de tener pasto suficiente en fincas de la región, por lo que se decidió llevarlas a esa otra comunidad autónoma para poder mantenerlas. Pero hace unas dos o tres semanas, debido a los problemas que Extremadura estaba teniendo con los brotes de esta enfermedad, se decidió retornarlas a Cantabria.

Cuando llegaron a recogerlas vieron que una de ellas había muerto y trasladaron el resto de las vacas en camiones. Uno de ellos se descargó en unas fincas cercanas a Peña Cabarga, y según nos cuentan ganaderos de la zona, algunas de ellas siguen todavía pastando allí sueltas.

No se sabe si la enfermedad se ha transmitido o no por esos rebaños en la región, pero el traslado de animales de una provincia a otra por parte de los ganaderos, para acudir a ferias y concursos, ha sido probablemente una de las causas de la rápida propagación de esta enfermedad. Ante esta situación, es preciso que los ganaderos extremen los cuidados y pongan en marcha medidas de prevención contra vectores en ganaderías y medios de transporte, y evitar el desplazamiento de animales o importar de zonas donde ya hay casos confirmados.

Las autoridades recomiendan a ganaderos y ayuntamientos que, en la medida de lo posible y para contribuir a evitar la propagación de la enfermedad, no celebren ferias ni concentraciones ganaderas y que quienes detecten en sus animales síntomas compatibles con esta enfermedad, se pongan en contacto con los veterinarios. El consejero de Ganadería, Pablo Palencia, explicó este jueves que el total de casos se ha elevado a 95 en 28 ganaderías de Cantabria, tras confirmarse ayer 61 nuevos.

Se aconseja evitar importar ganado de zonas donde ya hay casos confirmados

100 FOCOS EN UN AÑO. La enfermedad ha superado los 100 focos en España en menos de un año desde su llegada al país y en los últimos reportes se ha detectado ya en el norte peninsular (Cantabria y Asturias).

La patología comenzó por el sur peninsular en noviembre de 2022 y se ha ido extendiendo por prácticamente toda la península quedando, a día de hoy, sólo libres de esta enfermedad Galicia, La Rioja, País Vasco, Navarra y Cataluña, aparte de las islas, según el último informe del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) de esta misma semana.

Los expertos avisaron recientemente de que el país se enfrentaba a una «explosión» de casos de esta enfermedad que llevaba años circulando en el norte de África. De hecho, su llegada más probable, según los mismos expertos, fue la entrada de diminutos mosquitos infectados, de la especie «culicoides», desde el norte de África, transportados por las propias corrientes de aire que, una vez en el país, han picado e infectado a los animales. La mortalidad es superior en los ciervos, rondaría el 10%, y menor en el vacuno, donde estaría en torno al 0,5%.

Hay ya 105 ejemplares infectados de vacas que se localizan en 12 municipios

LA INFECCIÓN DA ‘LA PUNTILLA’ a LA GANADERÍA. La enfermedad hemorrágica epizoótica en Cantabria se une a la falta de lluvia, la inflación, el estrecho margen de beneficio y la ausencia de relevo. La falta de precipitaciones se agudizada en verano y somete a las explotaciones a una prueba más de supervivencia, por si no tuvieran poco con los precios disparados, el estrecho margen de beneficio y un trabajo muy sacrificado que complica el relevo generacional. Un cúmulo de circunstancias al que la infección de esta nueva enfermedad asesta «la puntilla para los ganaderos».

La propagación del brote infeccioso, se extiende más rápidamente con las altas temperaturas que asolan la región y gran parte del apís, sin que los ganaderos puedan hacer nada para erradicarla, por no tener vacuna autorizada para prevenirlo. Llegados a este punto, «te planteas muchas cosas porque estar trabajando catorce horas diarias los 365 días al año para no sacar rentabilidad no compensa», lamentan muchos ganaderos cántabros.

MUEREN SIETE VACAS EN LOS ÚLTIMOS DÍAS. La Consejería de Ganadería confirmó ayer que siete vacas han muerto a lo largo de esta semana por la enfermedad hemorrágica epizoótica, aunque este viernes el foco de contagios no se ha expandido. Según fuentes de la Consejería, se trata de ejemplares que han fallecido a lo largo de la semana y que, tras hacerles las pruebas, se ha confirmado que murieron por esa enfermedad. No se descarta que haya habido más muertes, ya que más ejemplares han fallecido estos días y están a la espera de hacer pruebas. Según Ganadería, los focos ubicados en Solares (Medio Cudeyo), Penagos y Valdáliga no se han expandido durante la jornada de este viernes y la enfermedad «no va en aumento en la región». 

CONTROLES "EXHAUSTIVOS" EN LAS CARRETERAS. La Consejería de Ganadería extremará las medidas restrictivas en la comarca ganadera de Solares, con controles «exhaustivos» en las carreteras para comprobar el cumplimiento de la documentación de desinsectación de animales y medios de transporte, con el fin de evitar la expansión del foco de la enfermedad hemorrágica epizoótica, que en estos momentos afecta a 105 ejemplares de ganado vacuno de carne que se localizan en 12 municipios. Se han detectado casos en Valdáliga, Santa María de Cayón, Piélagos, Penagos, Liérganes, Ribamontán al Monte, Anero, Castañeda, Medio Cudeyo, Riotuerto, San Roque de Riomiera y Marina de Cudeyo, informaba este viernes el Gobierno de Cantabria en un comunicado. Permanecen activadas las medidas restrictivas que impone el Plan Nacional Zoosanitario, de tal manera que se limita el movimiento de los animales en toda Cantabria y se implementan medidas de desinfección del transporte de animales.

En el caso de la comarca de Solares y alrededores se pide a los ganaderos que aíslen y no hagan movimientos de los animales para no expandir el foco.

Además, es obligatorio que los ganaderos cuenten con el certificado veterinario de desinfección de animales y de sus medios de transporte en vigor, así como el certificado veterinario de animales sin síntomas. Ante esta situación, es preciso que los ganaderos extremen los cuidados y pongan en marcha medidas de prevención contra vectores en ganaderías y medios de transporte, y evitar el desplazamiento de animales o importar de zonas donde ya hay casos confirmados.

Se recomienda a ganaderos y ayuntamientos que, en la medida de lo posible y para contribuir a evitar la propagación de la enfermedad, no celebren ferias ni concentraciones ganaderas y que quienes detecten en sus animales síntomas compatibles con esta enfermedad, se pongan en contacto con los veterinarios.

Por otro lado, la Consejería está ultimando la programación de cursos de bioseguridad agraria para los ganaderos de esta comarca y alrededores con el fin de frenar la propagación de esta enfermedad y aislar el foco.

FERIAS DE GANADO CANCELADAS. El Ayuntamiento de Hazas de Cesto ha decidido suspender la tradicional feria ganadera de ‘San Ciprianuco’ por «responsabilidad» y siguiendo las recomendaciones del Gobierno. La feria estaba prevista para el próximo 17 de septiembre y ya contaba con más de 200 ejemplares vacunos inscritos, así como más de 150 entre ovinos y caprinos, ha indicado el consistorio en un comunicado. Según el alcalde, Enrique Lastra, la decisión de cancelar esta «esperada feria» ganadera, «no se tomó a la ligera».

El Ayuntamiento de Cartes también ha suspendido la feria de ganado en Gamoneo, prevista para el primer domingo de octubre, siguiendo las recomendaciones de la Consejería y para evitar desplazamientos de animales ante el brote de la enfermedad hemorrágica epizoótica. Hasta el momento, en el municipio no se ha detectado ningún caso positivo de esta enfermedad, pero se toma la decisión de suspender la concentración ganadera «por responsabilidad, coherencia y seguridad», ha detallado en un comunicado el alcalde, Agustín Molleda.