Tres largas semanas de esfuerzo y trabajo han dado sus frutos y han hecho posible que Cantabria empiece a «respirar» gracias a las donaciones de más de 3.000 ciudadanos cántabros y muchas empresas que han conseguido recaudar más de 140.000 euros que se han destinado íntegramente a la adquisición en China del material sanitario más necesario en estos momentos. Tras una complicada operación, con un mercado «patas arriba» con todo tipo de problemas, tanto de acceso a las líneas de producción en China como para la carga del material en un avión con escasos vuelos y muchos retrasos, se cierra la iniciativa de crowdfunding ‘Cantabria Respira’ con la entrega de 377.000 mascarillas médicas, 10.000 pantallas de protección facial y 10.000 monos desechables.

El promotor de esta iniciativa, Julio Ceballos, ha asegurado a Efe que conseguir que todo este material llegue a la región en poco más de tres semanas es casi un tiempo récord en los tiempos que corren y además, han conseguido un precio que es competitivo para el material de buena calidad que se ha comprado. Los integrantes de la iniciativa están muy contentos de poder haber aportado desde la red de cántabros en el extranjero su granito de arena, aunque aseguran que lo que han hecho «no mueve la aguja» y no va a salvar ningún problema acuciante, se trata de un gesto y «al final uno se siente orgulloso de haber podido participar en una campaña de estas características».

Esta campaña surgió a través de un grupo de WhatsApp de cántabros que viven en el extranjero y comenzó con una iniciativa de crowdfunding en la que se pedía recaudar 60.000 euros en 48 horas para poder traer a Cantabria material sanitario de China. Tras dos días con más de 3.000 donaciones y diversas empresas interesadas en colaborar desinteresadamente, se consiguió recaudar la «sorprendente» cifra de 140.000 euros en apenas 48 horas y superó todos los límites y expectativas que tenían sus organizadores.

A partir de ahí, comenzaron los días más difíciles y largos para poder hacer llegar el material. Problemas en China, encontrar un vuelo con destino Madrid o retrasos en los envíos, son algunas de las piedras que se han encontrado en el camino este grupo de cántabros en el extranjero pero que, gracias a su constancia y dedicación han conseguido superar. El pasado 8 de abril fueron embarcados y enviados a España los lotes de material sanitario adquiridos con los fondos recaudados con esta campaña en China y el pasado miércoles, la mercancía ya había llegado al aeropuerto de Barajas, en Madrid, y hoy, al fin, ha llegado al almacén del Servicio Cántabro de Salud (SCS), en el Hospital de Valdecilla, para ser distribuido entre todo el personal.

Desde luego que la trayectoria ha sido larga y la batalla ardua para llegar hasta la región, pero esta situación demuestra que la unión y la fuerza de cántabros de todas partes del mundo es capaz de superar todo tipo de obstáculos y aportar su grano de arena en estos difíciles momentos, para estar cerca a pesar de la distancia.

MASCARILLAS. El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, ha defendido la utilidad de las mascarillas que está repartiendo el Gobierno regional entre todas los hogares de la región, cuya eficacia para proteger de contagios, ha dicho, está demostrada. «Estéticamente se pueden hacer los comentarios que se quieran pero de una cosa de estas lo que hay que buscar es que sea segura y eficaz, cosa que esta demostrada. Es un producto biodegradable que protege y no le ha costado nada al contribuyente», ha subrayado en su comparecencia tras el Consejo de Gobierno, con una de las mascarillas en la mano.

Revilla espera que no haya que hacer otra tirada porque confía en que el Gobierno de España «mandará mascarillas en masa» y anima a usar las de Cantabria, que es «segura en un 85 por ciento», mientras llegan: «Mientras tanto viva esta mascarilla, que le esta viniendo muy bien a la gente», ha defendido.

Indicó también que todo el mundo va a tener que usar mascarillas, como se está viendo en China o en Corea, y por eso el Gobierno puso en marcha esta iniciativa que es «única y pionera» y que ahora se está llevando a cabo también en otras comunidades.