Madrid, 6 feb (EFE).- Podemos vuelve a tensar la cuerda con su socio de coalición, ahora a cuenta de una reforma fiscal integral que no ha gustado nada a la parte socialista, y tras registrar una proposición no de ley la semana pasada, mañana organiza un acto con el exlíder laborista británico Jeremy Corbyn sobre justicia impositiva.

Al Ejecutivo no le ha parecido bien que se hayan adelantado cuando es una reforma prevista, han señalado fuentes de la parte socialista, que lo atribuyen a una intención de los morados de marcar la diferencia con el PSOE y que, en todo caso, consideran una falta de respeto.

Salvada por los pelos la reforma laboral, que ni de lejos es la que defendía Podemos y que ha generado no pocos encontronazos dentro del Ejecutivo, ahora se produce un nuevo choque por la urgencia de los morados en querer marcar la agenda en este nuevo ciclo electoral, según lo ve la parte socialista.

Y es en este contexto en el que se han apresurado a registrar una iniciativa legislativa y a convocar mañana al exlíder del Partido Laborista, representante del ala más izquierdista y del que fue expulsado años después cuando una investigación interna reveló su complacencia con el antisemitismo.

La reforma fiscal es uno de los compromisos del pacto de coalición, como insisten desde Podemos, que echa en cara otra vez a sus socios socialistas que se hagan los remolones con muchas de las medidas acoradas con ellos.

Y ahora les pasa lo mismo con la reforma fiscal comprometida, se quejan, y por eso ellos han cogido las riendas porque si fuera por el PSOE no saldría, aseguran a Efe.

Una fricción más en el Gobierno de coalición, que no será ni mucho menos la última teniendo en cuenta que el 13 de febrero arranca un nuevo ciclo electoral con las elecciones de Castilla y León y, por tanto, Podemos no va a dejar escapar la mínima oportunidad para forzar al PSOE a acatar lo firmado.

Para la parte socialista del Gobierno, Podemos se ha precipitado presentando esta iniciativa legislativa porque están aún a la espera del informe que han encargado a un comité de expertos sobre esta reforma y tiene de plazo hasta finales de mes.

Aunque Hacienda no ha concretado por dónde irán los cambios a la espera precisamente de ese informe, sí van a poner el acento en que la fiscalidad sea más justa y de ahí que prevean aumentar la contribución tributaria de capitales y empresas y que no recaiga el gran peso del esfuerzo sobre la clase media.

La reforma fiscal que promueve Podemos y que defenderá mañana el secretario de Estado de Derechos Sociales y coordinador económico del partido, Nacho Álvarez, en este acto con Corbyn que se celebrará en el museo Reina Sofía, plantea, por ejemplo, un recargo de 10 puntos en el tipo del impuesto de sociedades para las compañías eléctricas que facturen más de 10.000 millones de euros.

Recupera también otras propuestas como reforzar la progresividad del IRPF con nuevos tramos con mayores tipos impositivos para las rentas superiores a los 120.000 euros anuales y sustituir el impuesto sobre el patrimonio por uno nuevo sobre las grandes fortunas no bonificable por las comunidades autónomas con el fin de neutralizar paraísos fiscales interiores como creen que es Madrid.

Podemos ha elegido la reforma fiscal para arrancar este nuevo periodo de sesiones al ser una de las propuestas clave de su programa electoral y que como otras de sus banderas no quieren que se quede en un cajón cuando las elecciones están cada vez más cerca. EFE

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