En medio de la intensificación de los ataques rusos en el este y sur de Ucrania, el jefe de las Fuerzas Armadas ucranianas, Valeri Zaluzhni, se mantiene firme en guardar silencio sobre los detalles de una posible contraofensiva en 2024. La escasez de hombres y pertrechos ha generado un desafío adicional para Ucrania, que busca adaptarse a las nuevas circunstancias del conflicto.

En declaraciones recientes al portal RBC Ukraine, Zaluzhni subrayó la naturaleza seria de la guerra y se negó a revelar planes militares, destacando que la guerra no es un espectáculo. Esta postura se alinea con la reticencia general del liderazgo ucraniano a divulgar información estratégica, aunque la prensa alemana haya difundido informes sobre los preparativos de Kiev para una eventual contraofensiva.

La escasez de municiones ha sido denunciada por voces en el frente, llevando a las fuerzas ucranianas a adoptar una postura defensiva y a redistribuir recursos limitados. Oleksandr Tarnavski, jefe del grupo estratégico operacional Tavria, señaló la necesidad de reprogramar y reducir las tareas planificadas debido a las limitaciones de suministros.

A pesar de los desafíos, el Ejército ucraniano continúa ofreciendo una resistencia tenaz, destruyendo 44 tanques, 38 sistemas de artillería y 60 vehículos blindados de combate en un solo día, según informó el Estado Mayor de las Fuerzas Armadas ucranianas. La región de Avdivka, en Donetsk, sigue siendo un punto crítico del frente, con las fuerzas ucranianas repeliendo ataques rusos mientras buscan mantener el control.

El Centro para las Estrategias de Defensa, un think tank ucraniano, advierte que Rusia está introduciendo fuerzas adicionales y logrando modestos avances en medio de bajas significativas. El Instituto para el Estudio de la Guerra (ISW) informa sobre operaciones ofensivas rusas en varias regiones, incluyendo Donetsk y Zaporiyia, donde las fuerzas rusas avanzan en algunos sectores.

En el ámbito político, Rusia niega tener "demandas territoriales" hacia los países de la OTAN, según el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov. Putin también reiteró que Rusia no tiene intereses geopolíticos, económicos, políticos ni militares en combatir con los países de la OTAN, incluyendo a Estados Unidos, que considera el "único dueño de la OTAN". Lavrov calificó como "peligrosas" las reflexiones sobre la posible estación de cazas F-16 para Ucrania en países de la OTAN, subrayando la postura de Moscú en la coyuntura actual del conflicto.