Tras una Semana Santa marcada por los caprichos de la borrasca Nelson, España se prepara para enfrentar un giro climático espectacular. Samuel Biener, experto meteorológico de Meteored (tiempo.com), anticipa la llegada de una masa de aire cálido cargada de polvo sahariano que no solo elevará las temperaturas hasta los 30ºC en amplias zonas del país sino que también extenderá su influencia a lo largo del oeste de Europa, alcanzando incluso las lejanas tierras de Escandinavia.

De la Calma a la Tormenta de Arena

La predicción señala un ambiente estable en la mayor parte de España, aunque interrumpido por frentes que traerán precipitaciones al norte y a la vertiente atlántica. La situación dará un vuelco con la llegada de borrascas como Olivia, que propiciarán el ascenso de una masa de aire anormalmente cálida para esta época del año, llevando la isotermo de 20ºC hasta los 1500 metros sobre la Península y Baleares. Este fenómeno, aparte de traer calor sofocante, facilitará la entrada de polvo en suspensión desde el Sahara.

Un Fenómeno que Cruza Fronteras

Lo que comienza como una calima típica en España se transformará en un evento de gran escala que oscurecerá los cielos de Francia, Reino Unido, Suiza, y más allá, dejando a su paso lluvias de barro o incluso de "sangre", un espectáculo poco común en muchas de estas regiones. Este polvo no solo afectará la visibilidad y la calidad del aire, sino que también podría acelerar el deshielo en zonas nevadas, teñiendo de naranja el paisaje invernal.

Impacto en la Salud y el Medio Ambiente

El meteorólogo José Miguel Viñas advierte sobre el impacto significativo en la calidad del aire, con concentraciones de partículas PM10 que podrían exceder ampliamente los niveles considerados saludables por la Organización Mundial de la Salud. Este fin de semana, una nueva vaguada intensificará el fenómeno, empujando tanto el aire cálido como la calima hacia el centro de Europa.

Mientras España y sus vecinos europeos se preparan para enfrentar este inusual desafío climático, la atención se centra en las medidas de precaución y la necesidad de estar informados sobre las condiciones del aire. La llegada de esta gran lengua de polvo sahariano no solo es un recordatorio de la fuerza y el alcance de los fenómenos naturales sino también de la interconexión entre distintas regiones del planeta ante los cambios climáticos.