Un niño de 10 años murió ayer ahogado en las piscinas municipales de la localidad burgalesa de Poza de la Sal, según ha confirmado la Guardia Civil a BURGOSconecta. Según informó el servicio Emergencias 112 de Castilla y León, a las 19.38 horas recibió una petición de asistencia para un menor al que habían sacado inconsciente del agua y que estaba siendo atendido por personal sanitario que se hallaba «de manera particular» en la zona.

Emergencias avisó a la Guardia Civil y al centro coordinador de Urgencias, que envió un helicóptero sanitario, una UVI móvil, una ambulancia de soporte vital básico y personal sanitario del centro de salud de Briviesca. Los equipos desplazados continuaron con los intentos de reanimación, pero también sin resultados.

El pequeño veraneaba en el pueblo y era hijo de una familia vizcaína que pasa temporadas habitualmente en la localidad. El exalcalde de la localidad, José Tomás López, señaló que los vecinos sienten «una gran tristeza ante esta desgracia» porque «es la primera vez que sucede algo así en el pueblo». El Ayuntamiento baraja suspender todas las actividades programadas para los próximos días y decretar luto oficial.

Por el momento se desconocen las circunstancias que han provocado el suceso. Desde la Guardia Civil muestran cautela e indican que habrá que esperar a que se le practique la autopsia.