La Audiencia Provincial de Cantabria juzgará el próximo 28 de junio al hombre acusado de matar a otro de una puñalada tras una discusión en un bar de La Albericia (Santander) en el verano de 2021, y para el que el fiscal pide un total de 16 años de cárcel.

En concreto, considera al procesado, que tenía 45 años, autor de un delito de homicidio, por el que reclama 13 años de prisión, y de otro de lesiones cometidas con arma u objeto peligroso, por el que solicita tres años más.

Además, el ministerio público imputa a un segundo implicado en la agresión, primo del anterior, un delito de lesiones y pide para él un año de encarcelamiento.

Según el escrito de la fiscalía, uno de los acusados se encontró con dos hermanos y la pareja de uno de ellos en un bar de Santander. Tras tomar unas copas, salieron del lugar y se encontraron con otro hombre -el segundo acusado- primo del primero.

“Por razones desconocidas, se generó una fuerte discusión entre los dos acusados y uno de los hermanos”, el mayor, de 30 años, interviniendo también la novia de este y el hermano más joven, de 22 años.

En esa situación, el primer acusado “con un arma blanca cuyas características no se han determinado, pero en todo caso afilada, estilizada y puntiaguda, con intención de menoscabar la integridad física ajena, empujó y después apuñaló en el costado derecho” al hermano menor.

Poco después, “la contienda se centra más” en mayor, con el que se inició la discusión. Este salió en defensa de su hermano pequeño y se enfrentó al primer acusado, quien le propinó un puñetazo en la cara que le hizo agacharse y quedarse de costado.

Entonces, el acusado “con intención de acabar con la vida del contrario aprovecha para, con tres movimientos cortos y rápido, apuñalarle en el abdomen, antebrazo izquierdo y, principalmente, zona submamilar izquierda, hiriéndole mortalmente, aunque sin efecto inmediato”.

La novia de este intervino para interponerse entre ellos, pero el otro acusado la empujó y la tiró al suelo. Durante toda la contienda, este acusado llevaba a su perro pastor alemán atado con una correa, pero “le azuza continuamente contra el grupo de los hermanos y la mujer” y el animal muerde tanto al primer acusado como al hermano mayor. Los dos hermanos y la mujer tratan de huir, pero los dos acusados les persiguen, tratando de volver a atacarlos. Cesan su persecución cuando ven que aquellos se alejan y un hombre desde un vehículo les grita que paren. Entonces, se van, el hermano mayor agredido se desploma, al poco llega la policía y las urgencias médicas, y fallece horas después en el hospital.

La autopsia objetivó ocho heridas o zonas afectadas, en cabeza, rostro, abdomen, antebrazo, muslo y pecho, esta última fue vital, causante de la muerte.

Los hechos narrados constituyen, a juicio de la fiscalía, un delito de homicidio (sobre el hermano mayor) y otro de lesiones con arma u objeto peligroso (sobre el hermano menor) que se atribuyen al primer acusado, para el que se pide una pena de 16 años de prisión (13 y 3 años por sendos delitos) e indemnización de 128.200 euros para los padres y hermanos del fallecido, 42.600 euros para la novia de este y 1.500 euros para el hermano agredido.

Además, el ministerio público califica la acción del segundo acusado como un delito de lesiones (sobre la novia del fallecido) merecedor de un año de prisión e indemnización para esta de 6.600 euros.

La acusación particular que ejerce el otro agredido eleva la petición de pena por el delito de lesiones con arma peligrosa a dos años de prisión. Además, tanto él como su familia elevan la petición de indemnización a 190.600 euros para padres y hermanos y 42.600 euros para la novia.