Los arrestados, dos hombres de 25 y 20 años y una mujer de 23, todos vecinos de Santoña, están acusados de haber cometido 26 robos con fuerza en establecimientos comerciales, locales de profesionales sanitarios, centros de estudios y entidades públicas en las localidades de Santoña, Noja, Colindres, Castanedo y Elechas.

Los delincuentes, que iniciaron su oleada de robos en noviembre del año pasado, han sustraído más de 75.000 euros en efectivo y objetos de valor, incluyendo un notable robo en una ferretería de casi 35.000 euros en herramientas. La operación ha revelado no solo la amplitud del botín acumulado por los criminales sino también el considerable daño material causado para ejecutar sus fechorías.

La Guardia Civil, tras meses de investigación y seguimiento, incluyendo la vigilancia discreta de los sospechosos, logró interceptar a dos de los delincuentes en plena acción durante un asalto a una gasolinera en Castanedo. En el momento de su detención, los agentes recuperaron más de 1.000 euros en billetes y monedas, además de herramientas usadas en los robos.

Posteriormente, se llevaron a cabo registros en Santoña, resultando en el hallazgo de una importante cantidad de objetos robados, incluyendo herramientas nuevas, material informático y electrónico, y piezas de joyería.

La detención de la tercera integrante del grupo criminal se produjo el día anterior, sumándose a las acciones efectivas de la Guardia Civil para desmantelar esta red de delincuencia organizada. Los dos primeros detenidos han sido puestos a disposición judicial, ordenándose su ingreso en prisión.

Este exitoso operativo no solo representa un significativo avance en la lucha contra el crimen en Cantabria, sino que también subraya el compromiso de las fuerzas de seguridad con la protección de la propiedad y la tranquilidad de los ciudadanos de la región. La recuperación de una parte del botín robado es un consuelo para las víctimas de estos delitos, aunque aún queda trabajo por hacer para reparar completamente los daños ocasionados.