El Ayuntamiento de Santander está inmerso en un proceso de revisión y elaboración de una nueva ordenanza que regule el uso y funcionamiento de las terrazas en la ciudad. Esta iniciativa surge en respuesta a la necesidad de equilibrar los intereses comerciales de los hosteleros con el derecho al descanso y la calidad de vida de los vecinos. La alcaldesa, Gema Igual, ha enfatizado la importancia de esta regulación para mantener el orden y la armonía en el espacio público.

La nueva ordenanza se perfila como un documento integral que abordará diversos aspectos relacionados con las terrazas, incluyendo horarios de funcionamiento, dimensiones permitidas, sanciones por incumplimiento y medidas para mitigar molestias acústicas. Se prevé que esta normativa sea «súper valorada y pensada», según palabras de la propia alcaldesa, quien resalta la necesidad de tomar en cuenta todas las perspectivas involucradas en este tema.

Uno de los puntos que se están considerando es la implementación de medidas visibles para delimitar el espacio de cada terraza, con el fin de asegurar que se respeten las dimensiones permitidas y evitar posibles conflictos entre propietarios, vecinos y autoridades. Esta medida se presenta como una forma transparente de comunicar las restricciones y normativas vigentes, facilitando la labor de control por parte de la Policía Local y brindando mayor claridad a los ciudadanos en general.

La alcaldesa reconoce la complejidad del asunto y la diversidad de intereses en juego, pero subraya la importancia de regular de manera efectiva el uso de las terrazas para garantizar la convivencia en el espacio urbano. En este sentido, destaca la necesidad de mantener un diálogo abierto con todos los actores involucrados, desde vecinos y hosteleros hasta técnicos municipales y fuerzas de seguridad.

Se espera que este proceso de elaboración de la nueva ordenanza sea participativo, con espacios de consulta y debate que permitan recoger las opiniones y sugerencias de la ciudadanía en general. La alcaldesa ha manifestado su voluntad de que esta normativa refleje los intereses y preocupaciones de todos los sectores implicados, buscando alcanzar un consenso que beneficie a la comunidad en su conjunto.

En paralelo a este trabajo de elaboración normativa, el Ayuntamiento está tomando medidas para controlar posibles infracciones relacionadas con el funcionamiento de las terrazas, incluyendo acciones de vigilancia y aplicación de sanciones por incumplimiento de la normativa vigente. La Policía Local está realizando inspecciones periódicas para garantizar el cumplimiento de las disposiciones legales y velar por el respeto de los derechos de los ciudadanos.

En este contexto, también se ha hecho referencia a los estudios acústicos realizados en algunas zonas de ocio de la ciudad, que han revelado niveles de ruido nocturno por encima de lo permitido por la normativa vigente. Esta situación ha generado preocupación entre algunos vecinos y ha motivado la actuación del Ayuntamiento para abordar este problema y garantizar el derecho al descanso de la ciudadanía.

En definitiva, la elaboración de una nueva ordenanza de terrazas en Santander responde a la necesidad de regular de manera efectiva el uso del espacio público, conciliando los intereses comerciales con el derecho al descanso y la calidad de vida de los vecinos. Se espera que este proceso sea participativo y transparente, buscando alcanzar un equilibrio que beneficie a toda la comunidad.