27.04.2024 |
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CASO PIÑA'

Un Felipe Piña sin ética, por haber cometido un presunto delito de prevaricación, no dimite: Comeremos Piña

A raíz del 'caso Piña' que implica al pupilo de Marcano, director general de Transportes Felipe Piña, cabía preguntarse cómo reaccionaría los integrantes de la formación regionalista al conocer la imputación del candidato a la alcaldía de Santander Felipe Piña, por un presunto delito de prevaricación. Pues ya lo sabemos, no hay ética.
Felipe Piña.
Felipe Piña.
Un Felipe Piña sin ética, por haber cometido un presunto delito de prevaricación, no dimite: Comeremos Piña

A raíz del 'caso Piña' que implica al pupilo de Marcano, director general de Transportes Felipe Piña, cabe preguntarse cómo reaccionará los integrantes de la formación regionalista al conocer el pasado miércoles que la Justicia imputaba al candidato a la alcaldía de Santander Felipe Piña, por un presunto delito de prevaricación. En este sentido, todos los miembros del partido aceptan un código ético por el cual aceptan una serie de compromisos.

Entre estas «normas» internas de algunos partidos, todos los miembros aceptan «el compromiso de renuncia al cargo público, interno del partido o a cualquier candidatura a tales cargos en caso de ser imputado, procesado o condenado por las faltas y delitos que se determinarán en el reglamento al efecto que habrá de publicar la Comisión de Derechos y Garantías«.

CÓDIGO ÉTICO. El Partido Regionalista de Cantabria entiende que honradez es el principio básico en el uso responsable de los fondos públicos, entendida como sobriedad y transparencia en el gasto público, pero también como austeridad en los gestos, en la actuación del día a día, y por ello debe exigirse en todos los ámbitos de Gobierno en que se desenvuelva el PRC. La honradez e integridad es una de las bases de la confianza de los electores en el Partido Regionalista de Cantabria, y se convierte en un objetivo especialmente significativo. Nuestro anhelo es que las personas representativas del PRC en el ejercicio de la función pública, sean personas íntegras. Integridad traducida como honradez, honestidad, respeto por los demás, corrección, responsabilidad, control emocional, pulcritud, disciplina, lealtad, congruencia y firmeza en las acciones. según reza en su código ético. 

Pues lejos de dar explicaciones, no parece que les importe mucho dicho reglamento ético. Ayer el PRC ha presentado equipo de Felipe Piña, que buscará la Alcaldía de la ciudad. En un acto celebrado en el Palacio de Festivales de Cantabria y ante Miguel Ángel Revilla, y su jefe López Marcano. 

Ni corto ni perezoso, y sin tener en cuenta que los santanderinos, no toleran la corrupción ni falta de honradez en sus cargos públicos, el regionalista aseguraba que "el 28 de mayo vamos a comer piña, pero de primer plato". 

Un Felipe Piña sin ética, por haber cometido un presunto delito de prevaricación, no dimite: Comeremos Piña
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