Las traineras van a llegar al inicio de la temporada mejor que el pasado año, cuando, como el resto del mundo, sus remeros se tuvieron que pasar varias semanas confinados y apenas dispusieron de veinte días para entrenar en grupo antes de soltar la estacha por vez primera. Salieron a competir a ciegas, sin haberse podido probar, sin tener la certeza de cómo iban a responder ni qué motor tenían los demás. Doce meses después, la cosa pinta mejor, pero tampoco se ha recuperado la normalidad del todo porque ha habido menos oportunidades que de costumbre para salir a competir en invierno, lo que hace que las incertidumbres en verano estén aún más presentes de lo normal a bordo de las embarcaciones.

La pandemia suspendió todos los descensos tradicionales en Cantabria y eso quizá dé más valor a la regata que se celebrará esta tarde en la bahía santanderina. Se disputará a partir de las ocho la Bandera Bansander, que nunca ha tenido miedo a contraprogramar eurocopas o mundiales. Será la última regata de la que dispongan las traineras cántabras antes de afrontar sus ligas a partir del siguiente fin de semana, por lo que se puede percibir como todo un ensayo general que a buen seguro querrán aprovechar los entrenadores para afinar la puesta a punto y los pequeños detalles que tanto pueden marcar. Es cierto que cuentan con el precedente cercano de la Bandera Sotileza, pero ésta tiene unas particularidades propias. La prueba de esta tarde se parecerá más a las que tendrán que sortear durante todo el verano.

Si algo caracteriza a la Sotileza es que no hay ciabogas y que consta de un recorrido lineal que comienza en un punto y termina en otro diferente. Además, la remada se complica, sobre todo por la calle exterior, al tener que convivir con las incontrolables embarcaciones de recreo que siguen la prueba. Hoy eso estará mucho más limitado aunque en la bahía siempre hay que estar preparado para todo. El campo de regatas recuperará las maniobras y, en definitiva, las traineras afrontarán una prueba convencional que, teniendo en cuenta la cercanía del inicio liguero, puede ser considerada todo un ensayo general. Y espacio tienen para ello los entrenadores porque la tanda de honor, aquella que cerrará la tarde, estará compuesta por cuatro traineras de una misma categoría. No sucedía algo así desde que Astillero, Pedreña, Castreña y Camargo coincidieron en la ACT hace casi una década. Hoy todas ellas están un piso más abajo y saldrán a competir el próximo verano en la ARC 1.

Entre ellas forman casi un tercio de dicha liga, que este Esta tarde a partir de las ocho se disputa la Bandera Bansander, la última prueba antes del inicio de las ligas l La tanda de honor con Astillero, Castreña, Camargo y Pedreña podría formar parte de una regata de arc 1 deeste verano pocas las oportunidades este año de compararse con el vecino que bueno sería hacerlo al menos una vez antes de que arranque la competición oficial. Al menos, en eso confían los aficionados que se acercarán hoy a los muelles santanderinos. Los descensos de Pedreña, Castro, Astillero y Colindres, que eran los que estaban programados para este año, fueron aplazados primero y suspendidos después. De este modo, la única vez que las traineras han competido mínimamente han sido en dos pruebas organizadas por Camargo y la Federación a finales de febrero y principios de marzo. Nada más. No hubo desplazamientos al País Vasco y, por lo tanto, sólo pueden comparar su motor con el del vecino.

Lo demás, son intuiciones, vigilancia respecto a las referencias que marcarán sus rivales de la comunidad vecina a partir de sus actuaciones. Los vecinos. En ese sentido, siguieron muy de cerca lo que sucedió en Lekeitio la semana pasada, cuando se celebró una regata con una nutrida participación de traineras de la ARC 1 en las que, sobre todo, brilló Getaria, que se apunta como un claro aspirante a estar en lo más alto al dar continuidad a un proyecto muy joven que ya el año pasado dio muestras de una notable maduración. Más de lo mismo buscará Arkote, una embarcación a tener en cuenta, con un buen entrenador y que a buen seguro dará un paso al frente respecto al verano pasado. Por debajo de ambas estuvieron Kaiku, San Pedro o Deusto.

Lo que parece claro es que se viene uno de los veranos más potentes en la ARC 1. Y justamente ha coincidido con cuatro cántabros ahí metidos. Será importante llegar bien al primer día, a la contrarreloj que se organizará en Pasajes bajo el manto de San Pedro, para posicionarse bien, ya que con el paso de las semanas siempre cuesta más saltar de una tanda a otra. Y la Bandera Bansander, que en los últimos años había quedado demasiado condicionada al celebrarse apenas unas horas antes del inicio liguero, puede ser una buena herramienta para llegar al día señalado con una buena dosis de moral.

El equipo a batir esta tarde será Pedreña. Es algo que se ha vuelto común en los dos últimos años. La trainera negra ha cogido el testigo de la azul de Astillero, que durante mucho tiempo fue una embarcación inalcanzable por las demás en Cantabria, lo que restaba incertidumbre a la regata. Y el deporte necesita siempre de este ingrediente para levantar verdaderas pasiones. Y hace mucho tiempo que en este tipo de regatas autonómicas en las que no se invita a participar a ningún forastero no hay una gran competencia por la victoria ni una verdadera incertidumbre previa.

El remo cántabro anda falto de sorpresas. Quien más cerca puede estar de inquietar a Pedreña es Camargo, una trainera que, aunque mantiene una buena colección de rostros reconocibles, de nuevo ha tenido que cambiar a buena parte del equipo respecto al pasado año. Lo bueno es que sigue teniendo buena pinta, que el domingo pasado tampoco anduvo lejos de los pedreñeros y que, teniendo en cuenta que está Pedro Gabancho al frente, sabe que su tendencia natural va a ser positiva. Algo tiene el entrenador castreño para conseguir que sus embarcaciones vayan siempre de menos a más. El pasado año, se quedó a uno o dos fines de semana de tocar pelo. Posiblemente, esta vez no quiera esperar tanto. No se lo podrá permitir porque todos van a correr mucho. La ‘San José’ querrá estar hoy más cerca de ‘La Marinera’ que el pasado domingo.

Es consciente de que va a tocar sufrir tanto o más que el curso pasado por mantener la categoría y será fundamental un buen inicio liguero. Aprovechar la regata de hoy puede resultar vital ya que la rutina en el club azul ha sido más complicada de lo esperado al tener problemas habitualmente para completar el bote para entrenar por los compromisos laborales de los remeros. Hoy estarán en el agua para coger buenas sensaciones e ir en buena dinámica al estreno liguero en Pasajes. Antes de la tanda de honor se disputará una inicial con los veteranos de Pontejos, Colindres, que completa tripulación con remeros juveniles de Castreña, e IRC Santoña, que será la única representante cántabra este año en la ARC 2.

No habrá tanda femenina porque ‘La Marinera’ decidió tomar parte en la regata que organiza mañana Ondarroa para poder probarse con embarcaciones de la liga ETE, por lo que sólo quedaba Pedreña, que fue quien se llevó la Bandera Sotileza el pasado domingo. año tendrá trece traineras, y, por lo tanto, podrían hacer una buena simulación de competición oficial a poco que cada uno de los equipos se tome la cita con ambición. Ahí está la duda, ya que en este tipo de regatas federativas del mes de junio es difícil adivinar con qué intenciones sale cada embarcación y si la alineación será muy diferente a la que enseñen el próximo día 19, que es cuando se alzará el telón de la ARC 1. Sin embargo, han sido tan