Los palistas franceses Quentin Urban y Jeremy Candy se han impuesto este sábado en la 85 edición del Descenso Internacional del Sella. Lo han hecho por segundo año consecutivo y después de protagonizar una importante remontada para terminar imponiéndose en un apretado sprint en la llegada en Ribadesella.

Superaron en el último esfuerzo a los húngaros Adrian Boros y Bruno Kolozsvari y a los asturianos Miguel Llorens y Alberto Plaza, y los galos llegaron como vencedores marcando un tiempo de una hora, siete minutos y 53 segundos.

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— Octavio Crespo Remesal (@OctavioRemesal) August 5, 2023

A las puertas del cajón se quedaban las parejas formadas por Miguel Fernández Castañón-Luis Amado Pérez, Álvaro Fernández Fiuza- Guillermo Fidalgo y los sudafricanos Matthew Fenn-Joshua Fenn.

Ha sido en una carrera emocionante, tras recorrer por el río Sella los veinte kilómetros que separan las localidades de Arriondas y Ribadesella. La edición de este año ha estado además marcada por la falta de agua en el río, algo que ha obligado a los palistas a extremar las precauciones.

La salida se produjo pasadas las 12.00 horas en Arriondas, después de que se entonará el tradicional 'Asturias, patria querida'. Fue en ese momento cuando los voluntarios abrieron los 'cepos' (estructura metálica que atrapa las palas de los deportistas) y pueden correr hacia la embarcación.

Urban y Candy no salieron bien y se quedaron bastante atrás. Fue un momento en el que por delante cogieron la delantera la pareja de palistas asturianos formada por Miguel Llorens y Alberto Plaza, que impusieron un ritmo fuerte en cabeza de la competición.

Fueron eliminando a sus rivales a medida que pasaban los kilómetros y solamente parecían poder seguirles los húngaros Adrian Boros y Bruno Kilozsvari.

Sin embargo, la remontada de los franceses Urban y Candy fue ganando enteros e incluso ayudó a otras embarcaciones K-2 a llegar al grupo de cabeza. El resultado fue que al final llegaron siete embarcaciones juntas para disputar el sprint.

El grupo de cabeza se formó por las K-2 de Miguel Llorens-Alberto Plaza, Adrian Boros-Bruno Kolozsvari, Alberto Llera-Roberto Geringer, Álvaro Fernández Fiuza-Guillermo Fidalgo, Quentin Urban-Jeremy Candy, Miguel Fernández Castañón-Luis Amado Pérez y Matthew Fenn-Joshua Fenn.

Urban y Candy se preocuparon por pasar a la primera posición y marcar el ritmo, algo que lograron para tener así una mejor posición en la parte final. Con muy poca mar debido a la bajamar, consiguieron resistir a los ataques de Llorens y Plaza , y también a los de la pareja formada por Llera y Geringer.

Finalmente los franceses revalidaron su victoria. En segunda posición llegaron los húngaros Boros y Kilozsvari, mientras que terceros entraron Llorens y Plaza. Fue en uno de los finales del Descenso del Sella más espectaculares y con más embarcaciones implicadas.

En la categoría K-1 el triunfo fue para Walter Bouzan con un tiempo de una hora, 12 minutos y 24 segundos, que superó a Javi López y a Kiko Vega.

En K2 femenino hubo nuevas ganadoras. Las vigentes campeonas del mundo de maratón, Tania Álvarez y Tania Fernández, completaron el recorrido en una hora, 20 minutos y 4 segundos y consiguieron su primera victoria juntas.

Mientras, el K1 femenino tuvo un emocionante desenlace al esprint, en el que Irati Osa se coronó vencedora desbancando a la campeona de la anterior edición, Irene Gana. El podio lo completó Mara Santos, que pese a su veteranía no para de sumar podios.

En C2 se cumplieron los pronósticos, con Tono Campos y Diego Romero logrando su tercer triunfo consecutivo. Donde hay relevo en el palmarés es en C1, puesto que Diego Suárez fue esta vez tercero y la victoria se la llevó el campeón del mundo y de Europa de la categoría, Manuel Garrido. Por su parte en K2 mixto ganaron Aimar Amundarain y Eider Amundarain mientras que en la clasificación por clubes se impuso el Club Piragüismo El Sella por tercera edición consecutiva.

Fueron 772 embarcaciones las que tomaron la salida en una jornada con muy buena meteorología, muchos espectadores y en la que el pregón corrió a cargo de la campeona olímpica española en halterofilia Lydia Valentín.