Desde ayer, ya se puede entrenar en el agua, pero sólo Camargo dio ese paso. El resto, ha tenido que esperar. Pedreña confía hacerlo esta tarde, Castreña mañana y el resto, a lo largo de la semana y en función de las posibilidades que hayan tenido para realizar los tests del coronavirus, que fue una exigencia previa del Gobierno Cántabro para permitir que las plantillas de traineras puedan dar ese paso que llevaban tanto tiempo esperando.

Las reglas de juego fueron publicadas oficialmente ayer en el Boletín Oficial de Cantabria, dentro del decreto que establece las «medidas específicas correspondientes a la Fase 3 del plan para la tramitación hacia una nueva normalidad en la Comunidad Autónoma Cántabra». Y había que irse hasta el artículo 11.2 para encontrar la parte que interesaba a las traineras. Y en el mismo se detallaba que se permitía «la reanudación del entrenamiento en grupo en el remo de banco fijo con el objetivo de preparar el inicio de las competiciones, siempre que se adopten las medidas de higiene y control de síntomas para autovigilancia previstas en los protocolos de actuación sobre casos sospechosos de infección por Covid-19 y se realicen pruebas de detección previas al inicio de la actividad». Por último, se pedía también que fuera el entrenador quien se encargara de comprobar «antes de cada entrenamiento que ninguno de los deportistas presente síntomas compatibles con el Covid-19».

Quedó claro que no se puede embarcar sin una prueba previa que certifique que el virus no sube a bordo. Es la condición que exigió la dirección general de Deportes para, tras las presiones por todos lados que recibió entre la tarde del viernes y el sábado por la mañana, acabar por dar el visto bueno a las sesiones de trabajo colectivas. Los remeros de Camargo hicieron una prueba rápida durante el fin de semana de la que no salió ningún positivo, por lo que ayer entendieron que, manteniendo el protocolo de seguridad en los entrenamientos que han establecido ellos mismos, ya podían salir al agua. Y lo hicieron.

También los remeros de ‘La Marinera’ han pasado por uno de estos tests, pero aún no los consideran suficientes. Serán sometidos a un segundo y cuando mañana ya tengan todos los resultados confirmados, los remeros podrán salir al agua y, si lo estiman oportuno, incluso estrenar su nueva trainera, que tienen en casa desde el sábado. En el caso de Pedreña, los exámenes médicos se llevarán a cabo durante la mañana de hoy. Son tests rápidos cuyos resultados se pueden obtener en poco tiempo y, si todo está en orden, esta misma tarde echarán por fin el bote al agua. En Astillero no van tan rápido. Se someterán a los exámenes médicos entre hoy y mañana y, en cuanto ya tengan la confirmación de que todo está en orden, comenzarán esta nueva etapa en la que deberán trabajar de manera específica la remada. La previsión que tenían ayer en el club azul era bajar la ‘San José’ al agua entre el jueves y el viernes.

Es probable que otros equipos cántabros que competirán un piso más abajo (ARC 2) tengan que esperar un poco más. Aunque SDR Castreña, que tiene más medios, se ha movido más rápido, sus vecinos de AN Castro estaban ayer esperando un permiso del Ayuntamiento para activar la maquinaria y, «cuanto antes», pasar a realizar dichos tests con una clínica con la que mantenían negociaciones. Mientras, ayer en Santoña fue un día de reflexión porque a última hora de la tarde mantuvieron una reunión con los remeros para tomar una decisión sobre qué hacer con la temporada, ya que nunca han escondido que no salir a competir es una opción que contemplan. La plantilla decidirá. Si siguen adelante, esta misma semana pasarían las pruebas de detección del coronavirus.

Lo cierto es que los clubes, la Federación e incluso los ayuntamientos tuvieron que ‘pelear’ la posibilidad de saltar al agua esta misma semana para poder competir en igualdad de condiciones con sus rivales vascos. El director general tendrá una reunión hoy con su homólogo en el País Vasco, a quien llamó el pasado viernes para conocer de primera mano en qué condiciones iba a dar vía libre a las traineras. En la misma estará Gorka Leunda, gerente de la ARC, con quien unificarán y dejarán claros los protocolos a cumplir en las regatas programadas para el próximo verano. Porque el remo ya está lanzado y, de hecho, Cantabria fue el último en subirse al carro porque Galicia ya había establecido a finales de la semana pasada que en su fase tres también permitiría el entrenamiento de traineras. Mientras, ya en territorio galo, al que pertenece Lapurdi, que será, previsiblemente, un rival directo de ‘La Marinera’ el próximo verano, se abrió la veda antes. Así, la embarcación vasco - francesa se convirtió incluso en la primera en salir al agua al hacerlo el pasado fin de semana. La diferencia entre unos y otros ya será de días pero, al menos, los cántabros pudieron respirar tranquilos desde el momento en el que supieron que, por lo menos, no será de semanas.