El diario 'Marca' ha divulgado los mensajes intercambiados entre Jenni Hermoso y Rubén Rivera, director de marketing de la RFEF, durante la celebración del Mundial en Ibiza. La futbolista alega haber sido coaccionada, pero los mensajes no respaldan completamente su versión.

Rivera presentó estos mensajes ante la Audiencia Nacional como prueba, abarcando el periodo del 22 al 24 de agosto, cuando el grupo de internacionales, incluida Hermoso, festejaba en Ibiza.

A pesar de las afirmaciones de Hermoso sobre presiones y coacciones durante la fiesta, los mensajes filtrados no contienen referencias claras a Rubiales ni indican colaboración con la RFEF para normalizar la situación.

El primer contacto en Madrid revela a Hermoso pidiendo a Rivera incluir a su amiga Ana Ecube en el viaje a Ibiza. Aunque Hermoso afirma presiones, los mensajes confirman que Ecube pudo viajar. Según Hermoso, las coacciones comenzaron después por parte de Rivero y Miguel García Caba, director de Integridad, quienes supuestamente intentaron convencerla de grabar un video para minimizar el beso de Rubiales, junto con Albert Luque, director deportivo de la Federación.

Esta versión entra en contradicción con los mensajes del 23 de agosto, donde Hermoso pregunta a Rivera si puede llevar a seis amigos a la discoteca Usuhaia. Rivera acepta y se queja ligeramente de la difícil gestión de la expedición en Ibiza. El último contacto el 24 de agosto muestra a Hermoso preguntando sobre recoger sus cosas y bromeando sobre si el chófer, que no aparece, estará de "resaca”.