Vox ha presentado este lunes en el Congreso su propia propuesta de reforma del Reglamento de la Cámara Baja para blindar el español como única lengua permitida, en vísperas del debate para implantar el uso del catalán, el euskera y el gallego en sede parlamentaria.

El Pleno del Congreso debate este martes la toma en consideración de la reforma del Reglamento del Congreso para permitir el uso de las «lenguas que tengan carácter de oficial en alguna comunidad autónoma», una propuesta presentada por los grupos del PSOE, Sumar, Republicano, EH Bildu, PNV y Mixto.

Para Vox, la utilización de lenguas que no sean el español en el debate parlamentario «vulnera el derecho fundamental al ejercicio de la función representativa recogido en el artículo 23 de la Constitución, en tanto que todos los diputados que conforman la Cámara Baja tienen el deber de conocer el español y no otra lengua».

Así, plantea blindar el español añadiendo un nuevo apartado en el artículo 15 del Reglamento del Congreso, que quedaría redactado de la siguiente manera: «Los diputados están obligados a utilizar el español en el ejercicio de su actividad parlamentaria, tanto en sus intervenciones orales como en los escritos que presenten en el Congreso».

NUEVAS REGLAS

La propuesta de Vox no se ciñe únicamente al uso de las lenguas en sede parlamentaria y diseña las que han de ser, según la formación, las nuevas reglas del Congreso. Así, busca evitar determinadas prácticas, como la «vergonzosa» práctica de la cesión de diputados para la constitución de grupos, «que viola la norma y los resultados electorales», o los «falsos juramentos» de la Constitución.

En referencia a los grupos parlamentarios, el reglamento exige que para la constitución de un propio ha de contarse con un mínimo de 15 diputados o, en el caso de las formaciones que obtengan más de cinco, que al menos obtuviesen el 15% de los votos en las circunscripciones en las que se presentaba o un 5% a nivel nacional.

Sin embargo, en las últimas legislaturas, la Mesa del Congreso ha permitido la constitución de grupos que no cumplían los requisitos enumerados dando por buena la práctica de la cesión de diputados. Es el caso de ERC y Junts en esta XV Legislatura. Para Vox, esta técnica es «un auténtico fraude de ley», tal y como ha señalado el Tribunal Constitucional.

Para impedir que este tipo de situaciones vuelvan a darse, la formación de Santiago Abascal quiere modificar el artículo 23 del Reglamento para que quede prohibida explícitamente la cesión de diputados entre diferentes formaciones.

En cuanto a los juramentos, Vox denuncia que «es habitual» ver en el Congreso el empleo de fórmulas inválidas con «una retahíla que desnaturaliza y vacía el sentido del propio juramento. 

Vox quiere modificar el apartado 1 del artículo 4 del Reglamento incluyendo en él la siguiente fórmula: «El presidente preguntará al diputado que haya de prestarlo ‘¿Juráis o prometéis acatar la Constitución?’ La respuesta será mediante la expresión ‘Sí, juro’ o ‘Sí, prometo’». Además, se modifica el apartado 1 del artículo 20 para que quede aún más claro cómo se adquiere la condición de diputado.

Además, Vox quiere añadir un artículo 55 al Reglamento para que el Gobierno no pueda «ausentarse de manera sistemática del debate y votación en el Pleno», como denuncia que ha ocurrido con el Ejecutivo de Pedro Sánchez. 

Sería un artículo 55 bis para que al menos el ministro encargado de las relaciones entre el gobierno y las Cortes Generales y el ministro que ostente la competencia respeto de las materias objeto de la correspondiente iniciativa de control estén siempre presentes en las sesiones del Pleno, particularmente durante el debate y la votación de las iniciativas de la función de control.

VOTO TELEMÁTICO Y PROYECTOS DE LEY CAMUFLADOS

Por otro lado, Vox busca reformar el Reglamento para «hacer que el derecho a voto de los diputados pueda ser ejercido sin obstáculos» y «defiende ampliar los supuestos de uso del voto telemático siempre sujeto a que se solicite previamente».

En concreto, los de Santiago Abascal solicitan modificar el artículo 82.2 del Reglamento para que los motivos establecidos en los apartados 3 y 9 del artículo 37 de la Ley del Estatuto de los Trabajadores -como el matrimonio o el fallecimiento de parientes- sean considerados causas suficientes para que se conceda el voto telemático.