La situación política en España se tensa ante la posibilidad de que Junts per Catalunya retire su apoyo a la ley de amnistía en el Congreso. Esta decisión surge a raíz de los recientes desarrollos judiciales que implican a Carles Puigdemont, el expresidente catalán en el exilio, en presuntos delitos de traición y terrorismo.

Según informes, el juez de Instrucción número 1 de Barcelona, Joaquín Aguirre, ha extendido la investigación del caso Voloh, relacionado con Puigdemont, por otros seis meses. Esto ha llevado a Junts a reconsiderar su posición con respecto a la ley de amnistía, cuya votación se anticipa como un momento crítico para el PSOE y sus aliados.

La ley de amnistía excluye expresamente los delitos de traición, una cláusula que no había sido cuestionada por Junts hasta ahora. Sin embargo, la formación catalana podría ordenar a sus diputados votar en contra de la ley, forzando así su retorno a la Comisión de Justicia para posibles modificaciones.

Este movimiento estratégico de Junts se produce en un contexto de creciente presión judicial sobre Puigdemont y podría significar un cambio en el panorama político español. Además, el debate sobre la ley de amnistía incluirá intervenciones de importantes figuras políticas, aunque aún no se ha confirmado la participación del presidente Pedro Sánchez.

En el debate de este martes intervendrán los líderes del PP y de Vox, Alberto Núñez Feijóo y Santiago Abascal. Desde la Moncloa no han confirmado si Sánchez también o no. En la aprobación de la reforma constitucional del artículo 49 sí tomó la palabra, pero aquel era un debate más amable. El de hoy no lo será.