El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, ha dado entender este miércoles en el Congreso que no ha sido hasta hoy, y a través de El País, cuando ha podido leer la carta que el jefe del Gobierno, Pedro Sánchez, envió al Rey de Marruecos para informarle del cambio de posición de España ante el Sahara.

«Hoy he visto en un medio de comunicación la famosa carta», ha señalado durante la sesión de control en el Congreso, ante la presión ejercida por la portavoz de Exteriores del PP, Valentina Martínez Ferro. La afirmación ha sorprendido a propios y a extraños ya que resulta difícil de creer que el jefe de la diplomacia española no hubiera leído antes ese documento.

Sobre el contenido de la misiva, Albares ha hecho hincapié en que se encuentra «en el marco de Naciones Unidas» y para una solución «mutuamente aceptable». «Por lo tanto, nada nuevo», ha señalado, insistiendo en el argumentario socialista de que no hay cambio de posición.Una idea con la que él mismo ha entrado en contradicción al defender el paso dado por Sánchez como un cambio necesario porque «España lleva muchos años siendo un espectador y tiene que ser un actor» que juegue «internacionalmente para resolver» la situación de los saharauis.

«España lo que tenía antes era una no postura», ha señalado. «Hay que dejar de hablar aquí dentro de la cuestión del Sahara y hablar en Naciones Unidas», intentó justificar, criticando que hasta ahora nuestro país no hacía «nada» por apoyar al enviado especial de la ONU.

La otra idea fuerza en la que se ha apoyado el ministro de Exteriores es que el conflicto del Sahara «dura ya 46 años» y «son demasiados años». «Piense en la población saharaui de los campamentos, piense en apoyar al enviado especial de Naciones Unidas», ha instado a Martínez Ferro, provocando protestas en la bancada popular.

Posteriormente, y a preguntas del diputado de EH Bildu Jon Iñarritu, el titular de Exteriores ha destacado que la carta de Sánchez al Rey de Marruecos no persigue «que España gane nada» sino de contribuir a desencallar« el conflicto. «Si no hacemos algo, durará 46 años más», ha enfatizado. En esta línea, ha señalado que hasta la fecha se ha reunido cuatro veces con el enviado especial de la ONU para el Sahara en los cuatro meses que lleva de misión.Albares también ha señalado que el PP «con Mariano Rajoy al frente» saludaba los «esfuerzos serios y creíbles» de Marruecos para solucionar la cuestión del Sahara durante las reuniones de alto nivel entre ambos países. «El mismo lenguaje que hoy se critica por parte del PP», atacó al primer partido de la oposición.

Previamente, la portavoz de Exteriores del PP había echado en cara del ministro que sea él el que primero vaya a dar explicaciones al Congreso por el cambio de postura en el Sahara -lo hará esta tarde- cuando es Sánchez el responsable de la política exterior. «Han conseguido hacer de la política exterior de España un esperpento en el que nadie se representa: ni nosotros, ni la mitad de su gobierno ni sus socios de investidura ni la mitad de su partido», le atacó.

«Usted llegó para solucionar el conflicto con Marruecos y lo único que sabemos es que nos ha creado uno, no menor, con Argelia en plena escalda del precio del gas», prosiguió, exigiendo a Albares que aclarara si avisó o no a este país de la decisión sobre el Sahara. El titular de Exteriores no respondió a esta pregunta.A diferencia de lo que sucedió en la sesión de ayer, cuando varios diputados de Unidas Podemos exhibieron banderas saharauis durante el pleno del Congreso con la autorización de la dirección de su grupo parlamentario, hoy no han protagonizado ninguna protesta en el hemiciclo. No obstante, toda la bancada morada, con la vicepresidenta Yolanda Díaz y las ministras Ione Belarra e Irene Montero a la cabeza, han manifestado su protesta por el cambio de posición de Sánchez decidiendo no aplaudiendo hoy a Albares.