A pesar de que este marcado descenso aún dista de la bajada experimentada entre mediados de abril y finales de julio -en aquella ocasión bitcoin perdió más de la mitad de su valor-, esta nueva caída plantea la duda de si la criptodivisa se asemeja más a un activo de riesgo que a un refugio como podrían ser el oro, el yen o el franco suizo en tiempos turbulentos.

Correlación con los mercados financieros

En opinión de algunos expertos, la criptomoneda se comportaría como un activo de riesgo más según muestran los movimientos en el precio de Bitcoin de las últimas semanas, pues el descenso en su cotización ha coincidido en el tiempo con las caídas generalizadas de los principales índices mundiales, que acusan ahora el temor que el anuncio de las nuevas restricciones anunciadas por los gobiernos, para contener tanto a la nueva variante ómicron, puedan tener en la economía.

Y esta correlación también parece afianzar su fundamento en el hecho de que los índices hayan registrado una recuperación general -el S&P 500 prácticamente no ha dejado de crecer desde el 20 de diciembre- tras comprobarse la mayor levedad en la sintomatología provocada por esta nueva variante del coronavirus. Recuperación leve, pero que también ha reflejado el precio de la criptomoneda.

Además, en opinión de esos expertos, también puede hallarse correlación entre los movimientos en el precio de Bitcoin y las expectativas de inflación, ya que las inversiones en la criptomoneda son mayores cuando estas expectativas van en aumento.

Muestran, en definitiva, como en lugar de comportarse como un refugio seguro en tiempos de crisis, su cotización disminuyó a la misma velocidad que el S&P 500, aunque no se ha recuperado igual de bien que el popular índice.

Bitcoin como valor refugio

En la otra cara de la moneda se sitúan los incondicionales de Bitcoin que ensalzan sus virtudes con independencia del escenario en que nos situemos.

Primero debemos considerar que un valor refugio es un instrumento que incrementará su valor en períodos de incertidumbre en los mercados, siendo un elemento clave en las estrategias de inversión y en la diversificación de carteras.

La realidad es que Bitcoin ha incrementado su valor en los últimos diez años superando todas las expectativas y para quienes creen en su valor como refugio, su escasez digital le dota de confianza como inversión a largo plazo, puesto que el suministro se limita a 21 millones y hace que sea percibido por algunos como el oro digital.

Y es que quienes defienden a Bitcoin como reserva de valor, basan sus argumentos en aspectos tales como que la volatilidad de la criptomoneda no sería tal, sino que más bien se correspondería con la tendencia de una milimétrica evolución, desde hace más de una década, en la que se reflejaría una disminución de esta volatilidad en el año 2021 de hasta un 123% frente al 780% del 2010.

Para estos analistas se trataría de un proceso lógico y esperado dado que la estabilidad del mercado de Bitcoin iría en aumento a medida que se incrementa la entrada de capital en él.

Por otra parte, su fuerza quedaría demostrada por las continuas revalorizaciones que ha experimentado a lo largo del tiempo, obedeciendo al principio de mínimos y máximos crecientes desde el 2011.

A pesar de todo, esto no evitará los movimientos bruscos y repentinos en su cotización, sin embargo, la previsión es que esta volatilidad vaya en descenso a medida que se produce una constante revalorización de este activo que, en opinión de estos expertos, lo afianzaría como un verdadero valor refugio.

La elección de los fondos institucionales

Nos situamos en un momento en que el precio del oro ha experimentado un descenso aproximado del 5% en el último año, mientras que Bitcoin ha pasado de cotizar algo más de 33.000 dólares en enero del 2021, a los 47.000 dólares en este preciso momento. Razón suficiente para muchos inversores para elegir la criptomoneda en lugar del oro para protegerse de la inversión, a pesar de la alta volatilidad que está experimentando.

Al parecer, los inversores institucionales percibirían Bitcoin como una cobertura superior al oro frente a la inflación. Pero, a pesar de todo, el oro continúa ocupando el pódium como activo más valioso del mundo.