El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla (PRC), intenta desviar su mala gestión con el Corredor Atlántico y habla de un momento «muy propicio» para lograr el tren rápido con Bilbao y llama a todos los grupos del Parlamento regional a apoyarla y a «unir fuerzas» para hacer «presión» ante el Gobierno central y Europa para conseguirla pues, según ha dicho, es una conexión «de futuro» que, unida a la que habrá con Palencia, hará que la comunidad será «imparable».

Así lo ha afirmado este lunes en su comparecencia en el Pleno para dar cuenta, a petición de Ciudadanos, del viaje que realizó hace un par de semanas a Bruselas, donde reivindicó la inclusión de Cantabria en el Corredor Atlántico, no solo a través de la conexión con la Meseta --que da por «garantizada»-- sino también por Bilbao.

Revilla ha hecho este llamamiento a los grupos a unir fuerzas para defender y reclamar este tren con Bilbao, algo que espera que se materialice en los próximos plenos en la aprobación unánime de una iniciativa parlamentaria.

Además, ha anuciado que ha enviado hace unos días una carta al presidente del Gobierno central, Pedro Sánchez, para pedirle que él, «personalmente» --más allá de la petición formal que el Ejecutivo hará ante Europa a favor de la inclusión de este tren a Bilbao-- considere que es «fundamental para la articulación de España» y que va «en línea absoluta de lo que preconiza europa». «Europa está en este camino, no hay otro: ferrocarril, ferrocarril, ferrocarril», ha señalado. Revilla ha insistido en que, para intentar modificar el plan actual e incluir la conexión con Bilbao en el Corredor Atlántico, «la fuerza del Gobierno de España es fundamental». El presidente de Cantabria ha reconocido que «no es optimista» a que la propia Comisión Europea incluya esta conexión en su propuesta, pero ha recordado que ésta puede ser enmendada desde el Parlamento europeo, motivo éste por el que ha acudido a Bruselas a recabar apoyos entre los principales grupos de la Eurocámara y se ha reunido con eurodiputados españoles que, de forma general, se han mostrado favorables a esta conexión.

Sin embargo, ha recordado que, para ello, será preciso tener el apoyo, no solo de los españoles, sino también de otros eurodiputados de sus grupos para que la petición de Cantabria pueda ser incluida.

REVILLA LLEGA TARDE

La posición ha opinado que Revilla no ha traído de este viaje «absolutamente nada» y viene «con las manos vacías» y ha coincidido en que esta visita del presidente cántabro a Bruselas «llega 10 años tarde» tras la «irresponsabilidad» y «negligencia» que, a su juicio, ha mostrado el presidente cántabro respecto a la inclusión de Cantabria en las redes transeuropeas de transporte.

Toda la oposición (PP, Cs y Vox) ha acusado a Revilla de no haber trabajado «a tiempo», hace una década, en la inclusión de Cantabria en el Corredor Atlántico.

El portavoz del grupo popular PP, Íñigo Fernández, ha afirmado que fue en los años 2009, 2010 y 2011 --etapa en la que Revilla era presidente-- cuando se negoció y diseñaron los trazados y en 2011 el Gobierno presidido por José Luis Rodríguez Zapatero (PSOE) envió la propuesta de España en la que Cantaria quedaba excluida de dicho corredor y que se aprobó de forma defintiva por Europa en 2013.

En ese momento, según el PP, Revilla «no se preocupó» y «no protestó» por quedar fuera de la propuesta remitida por su «socio» Zapatero.

Además, PP, Cs y Vox han preguntado a Revilla «dónde estaba» cuando en 2017, 2018 y 2019 Galicia, Asturias y País Vasco hacían «frente común» ante el Gobierno de España para reclamar ser también incluidas, algo que, según han señalado, a diferencia de Cantabria consiguieron.

Por todo ello, han culpado a Revilla de ser el principal «culpable» de que Cantabria haya quedado fuera por su «negligencia» e «irresponsabilidad» del pasado, que, a su juicio, el presidente cántabro «intenta a arreglar» con un viaje a Bruselas «10 años tarde» para «mendigar», según le ha dicho Cs, la inclusión de Cantabria.

Además, el PP le ha reprochado que, además de tarde, acuda a Bruselas «cambiando las peticiones sobre la marcha» al reclamar, no la conexión por Palencia, sino por Bilbao.

Fernández ha aclarado que, para su partido, «tan razonable» es una conexión «como la otra» pero ha censurado este cambio en las peticiones. Además, ha subrayado que, cuando en 2009, el entonces ministro de Fomento socialista José Blanco planteó este tren, «Revilla dijo que no», mientras que ahora éste la ve como «prioritaria». Además, ha anunciado que el PP llevará al Pleno del próximo lunes, 29 de noviembre, una proposición no de ley, donde pedirá el apoyo unánime de la Cámara para pedir que Cantabria sea incluida en el Corredor Atlántico.

Ni Revilla ni los portavoces de los grupos que sustentan al Gobierno, Pedro Hernando (PRC) y Noelia Cobo (PSOE) se han mostrado de acuerdo con la visión de la oposición sobre los culpables y han insistido en que el reglamento actual se aprobó definitivamente en 2013, cuando en Cantabria y en España gobernaba el PP.

Además, Cono ha señalado también que, en la última etapa del Gobierno del PP, era ministro de Fomento el santanderino Íñigo de la Serna --»el cántabro más experto en infografías, ha dicho»--, a quien ha recriminado que «no tuviera un rato para acordarse» de la inclusión de Cantabria en el Corredor Atlántico. Pese a todo, Revilla ha insistido en que Cantabria, al margen de la petición de tren con Bilbao, sí va a estar conectada con el Corredor Atlántico al tener ya «garantizada» la conexión a través de Palencia, una obra que, según ha insistido, se va a hacer y que, según ha dicho, va a estar «antes» de que la tengan otras comunidades del norte como Galicia o Asturias. De hecho, ha recordado que ya tiene dos tramos en obra (Palencia-Amusco y Amusco-Osorno) y otros dos se licitarán en 2022 (en marzo Osorno-Calahorra de Boedo y en mayo Calahorra-Alar del Rey) y estarán ese mismo año en obras. Por ello, prevé que en 2025 ya estén concluidas las obras.

Los dos tramos que faltan para llegar a Cantabria (Alar-Aguilar de Campoo y Aguilar-Reinosa) están, según ha señalado Revilla, en fase de estudio informativo que, según ha dicho, está pendiente de dos estudios hidrogeológicos. Según ha dicho, «a mitad del año que viene», el Ministerio de Transportes cree que puede estar aprobado este estudio informativo contando ya con informe de impacto ambiental, para «inmediatamente» poder llevar a cabo la redacción del proyecto. «Los pasos son complicados pero son los que hay que hacer. Las cosas importantes tardan», ha dicho Revilla.

Frente a esta visión optimista de Revilla sobre las posibilidades de contar con estas dos conexiones, la oposición ha expresado sus «dudas» al respecto, sobre todo en cuanto a los plazos. El PP ha asegurado tener dudas en los plazos en los que se va a ejecutar la conexión con Palencia y Cs ha advertido de que no habrá tren con Bilbao hasta que no haya financiación europea.

«Para ver ese Santander-Bilbao, cómprense el sillón más cómodo que tengan y siéntense a descansar con mucha comodidad porque van a ser años y años los que van a pasar para que lo veamos», ha dicho el portavoz naranja, Félix Álvarez.

Sin embargo, Revilla ha insistido en que el borrador del estudio informativo del tren a Bilbao va a estar «en unos meses» y planteará las alternativas sobre cuestiones como el trazado o las paradas, un debate que, según ha dicho, va a ser «polémico» y tendrá un «coste político» que, sin embargo, «hay que asumir».

En este sentido, ha recordado que el Gobierno de Cantabria apuesta con un tren que pueda unir Santander con Bilbao en 45-50 minutos y que haga paradas en Laredo y Castro Urdiales.

Ganadería

El Parlamento de Cantabria ha aprobado este lunes en el Pleno, con el respaldo de todos los partidos, una iniciativa de Ciudadanos (Cs) que proponía varias medidas para ayudar al sector primario de la comunidad y, principalmente, dirigida a frenar la «sangría» del sector lácteo. Entre ellas, se pedía al Gobierno de España un estudio de la cadena de valor e información de precios de la leche «actualizado»; la creación en Cantabria de un Observatorio de Precios de Mercado de la cadena agroalimentaria; la intensificación de las inspecciones en la comunidad contra la venta de leche a pérdidas, o el adelanto del pago de las Ayudas del Plan de Desarrollo Rural y las ayudas asociadas directas para para paliar la situación económica derivada del actual aumento de los costes de producción, entre otras.