Hoy en Cantabria, agricultores y ganaderos están protagonizando una enérgica protesta exigiendo cambios significativos en el sector agrario. Concentraciones y tractoradas están bloqueando las autovías A-8 y A-67, en una manifestación destinada a resaltar las difíciles condiciones que enfrentan.

Organizadas por las principales asociaciones agrarias de la región, estas movilizaciones son parte de una serie de acciones coordinadas en toda la Cornisa Cantábrica. Puntos estratégicos como Colindres, Unquera y Reinosa son testigos de esta protesta, que busca visibilizar los desafíos derivados de la burocracia y la necesidad de reformas legislativas urgentes.

Luis Pérez Portilla, secretario general de UGAM-COAG, anticipa una masiva participación en estas concentraciones, reflejando el creciente descontento en el sector. Más allá de denunciar las condiciones actuales, los agricultores demandan soluciones tanto a nivel nacional como europeo, enfatizando la importancia de precios justos y una gestión responsable.

La reciente tractorada en Santander, con la presencia de 250 tractores y vehículos, ejemplifica la determinación del campo cántabro en la búsqueda de medidas urgentes. Estas acciones no se limitan a Cantabria, ya que se esperan movilizaciones similares en Galicia y Asturias, evidenciando un clamor común por una reforma positiva de la Política Agrícola Común y por tratados comerciales más equitativos.

La respuesta del Gobierno central y de la Unión Europea será fundamental para el desenlace de estas protestas y para el futuro del sector agrario en la Cornisa Cantábrica. La lucha continúa, con los agricultores y ganaderos mostrando una determinación inquebrantable en la defensa de sus derechos y en la búsqueda de un futuro más justo y sostenible para el campo español.

En este momento, según informes de UGAM-COAG, los agricultores están asentados en puntos estratégicos como Colindres, Unquera y Reinosa, donde permanecen firmes para visibilizar su lucha. Con sus tractores como barricadas, estos hombres y mujeres del campo hacen eco de sus demandas en lugares clave, resaltando la importancia y la urgencia de las reformas necesarias en el sector agrario.

En Colindres, uno de los puntos de la protesta agraria en Cantabria, los agricultores han llevado su reclamo al siguiente nivel. En una muestra de determinación y resistencia, han encendido una fogata de paja en la rotonda principal de la entrada a la ciudad. Este acto simbólico no solo busca llamar la atención sobre las dificultades que enfrenta el sector agrario, sino que también representa el fuego ardiente de su protesta, un fuego que arde con la esperanza de un cambio significativo.

La imagen de la paja ardiendo en la rotonda principal de Reinosa es poderosa y evocadora, capturando la atención de quienes pasan por allí y recordándoles la urgencia de actuar ante las demandas de los agricultores y ganaderos de la región. Este gesto radical pero pacífico es una manifestación de la determinación de estos hombres y mujeres del campo, dispuestos a hacer lo que sea necesario para hacer escuchar su voz y asegurar un futuro mejor para ellos y para las generaciones venideras.