El presidente de la Autoridad Portuaria de Santander, Francisco Martín, dijo ayer que «nadie se ha hecho daño con las concertinas» instaladas en la valla que rodea las infraestructuras portuarias de la ciudad, y las tentativas de acceso ilegal saltando ese perímetro «se han dividido por diez, lo que significa que si antes eran 20 ahora ya no llegan ni a dos».

Así lo indicó ayer a preguntas de los periodistas para destacar que el «efecto disuasorio» con el que se colocaron estos dispositivos «ha funcionado».

En consecuencia, en caso de que esa tendencia siga a la baja y si el Ministerio del Interior mantiene los medios de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado que están produciendo esa reducción de la intensidad del intrusismo, «nos plantearemos la desinstalación de estos dispositivos, en su momento», dijo Martín. 

Informe del Defensor del Pueblo

Cuestionado por información que el Defensor del Pueblo ha solicitado a la APS sobre el Plan de Protección del Puerto (PPP), El presidente de la Autoridad Portuaria indicó que se trata de un documento «con cierto nivel de reserva», por lo que están a la espera de la respuesta del Ministerio para hacerlo público o no.

«Pero en ningún caso se ha puesto en tela de juicio la legalidad o no de unos dispositivos que son legales. Si el Estado decide que las concertinas son ilegales, pues que las ilegalice, pero a día de hoy son legales», concluyó el presidente de la Autoridad Portuaria. Se trata, explicó, de dar a toda esa zona «la misma calidad de ciudad de primera» del tramo entre la Estación Marítima y Puertochico. «La idea es continuar y que la gente tenga ganas de pasear hasta el Barrio Pesquero», una zona que tiene que tener «unas características semejantes» a las que tiene la anterior.