La hoja de ruta se ha seguido meticulosamente y Pedro Rocha emerge como el nuevo presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), tras el acuerdo alcanzado por la Comisión Electoral en su última reunión. Este nombramiento llega en un momento crucial, donde la estabilidad de la federación y su participación en eventos futuros, como la Eurocopa, se encuentran en entredicho.

Los 107 avales obtenidos por Pedro Rocha han sido validados, lo que lo consolida como la figura que liderará la RFEF en los próximos meses. Este nombramiento es vital para desenredar una situación compleja que ha puesto en peligro la participación de España en la Eurocopa de Alemania, ante posibles injerencias gubernamentales en la federación.

La composición detallada de la Comisión de Supervisión, Normalización y Representación que acompañará a Rocha en su gestión también será clave en este proceso. Esta comisión será fundamental para garantizar la continuidad de las operaciones de la federación, al menos hasta que se celebren nuevas elecciones en otoño.

A pesar de las tensiones y especulaciones que rodean el caso, tanto la FIFA como la UEFA parecen dispuestas a respaldar esta designación, ya que entienden que la presencia de Rocha en la federación busca supervisar más que controlar, garantizando así la autonomía del fútbol español.

El objetivo primordial es asegurar que el fútbol no se detenga en España, y para ello es crucial contar con un liderazgo sólido en la RFEF. Sin embargo, no se descarta la posibilidad de convocar nuevas elecciones una vez que Rocha haya asumido su cargo, lo que marcará los próximos pasos en este proceso de transición.

La sesión de la Comisión Electoral, que se llevó a cabo el viernes 26 de abril, fue crucial en este proceso de proclamación. Además de la proclamación de Rocha como presidente, la comisión también abordó el recurso presentado por Miguel Galán, elevándolo al Tribunal Administrativo del Deporte para su resolución.

El nombramiento de Pedro Rocha como presidente de la RFEF marca un nuevo capítulo en la historia del fútbol español, y se espera que su liderazgo contribuya a restaurar la estabilidad y la confianza en la federación en medio de estos tiempos turbulentos.