Río de Janeiro, 21 dic (EFE).- La Fuerza Aérea Brasileña (FAB) informó este martes que firmó un contrato para adquirir un nuevo lote de IRIS-T, los misiles de corto alcance aire-aire de última generación fabricados por un consorcio europeo, para equipar los 36 cazas de combate Gripen que le encomendó al fabricante sueco SAAB.

La FAB ya había adquirido dos lotes, uno con 4 unidades para probarlas en los aviones y otro para comenzar a equiparlos, de este tipo de misil equipado con sensor infrarrojo y empuje vectorial, que considera como "un armamento esencial para ser usado en combate aéreo por las aeronaves F-39" (como los Gripen fueron denominados en el país).

Según un comunicado de la Fuerza Aérea, el IRIS-T es "un misil inteligente, con alta capacidad de maniobra y resistente a contramedidas electrónicas" que se caracteriza por su capacidad para perseguir un blanco mediante un sistema que "integra la mira del casco del piloto y otros sensores".

Los misiles, agrega la nota, también se caracterizan por tener "una zona de tiro significativamente aumentada, alcance de adquisición perfeccionado y mayor precisión para dar en el blanco".

De acuerdo con la FAB, los IRIS-T, con capacidad para alcanzar blancos hasta 25 kilómetros de distancia, complementarán el sistema de arma de los Gripen, que ya cuenta con los Meteor, misiles igualmente aire-aire pero de largo alcance.

"La integración de las dos armas elevará el poder de combate y las posibilidades de éxito contra posibles oponentes. Con esa serie de armas en acción, la Fuerza Aérea garantiza, con mayor eficacia, la soberanía del espacio aéreo de cara a la defensa de la patria", concluye la nota.

Los IRIS-T (Infra Red Imaging System Tail/thrust Vector-Controlled, por sus siglas en inglés) son fruto de un programa de defensa europeo liderado por Alemania y que se propuso desarrollar un misil aire-aire de corto alcance capaz de sustituir los Sidewinder, usados en varios tipos de aeronaves de combate.

Alemania, con cerca de 50 % de participación en el programa, lidera el consorcio fabricante mediante la empresa BGT (Bodenseewerk Geratetechnik GmbH), pero en la iniciativa también tienen parte empresas de Italia, Suecia, Dinamarca, Holanda, Portugal y España.

Entre los participantes en el consorcio destaca la SAAB, que es el fabricante de los Gripen y el responsable por adaptar los misiles a estos cazas.

Los IRIS-T tienen 2,9 metros de largo, 13 centímetros de diámetro y alcanzan una velocidad de mach 3, según sus fabricantes.

Brasil recibió en septiembre del año pasado el primero de los 36 Gripen que encomendó y la previsión es que cuente con la flota completa en 2026, cuando sustituirá varios de los cazas de su flota, principalmente los F-5 y los Mirage 2000, que ya están obsoletos.

El último lote de 15 cazas será totalmente fabricado en una planta de la brasileña Embraer con los ingenieros de SAAB actuando tan solo como consultores.

La fabricante sueca se adjudicó en 2013 el contrato por 5.400 millones de dólares para venderle los 36 cazas a Brasil en una licitación en la que también compitieron los Rafale de la empresa francesa Dassault y los FA-18 Súper Hornet de la estadounidense Boeing. EFE

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