La Comisión Europea ha tomado una medida drástica al suspender la comercialización de la vacuna COVID-19 desarrollada por AstraZeneca, luego de que el laboratorio reconociera por primera vez la posibilidad de que su vacuna pueda causar el síndrome de trombosis con trombocitopenia (TTS) en casos muy raros. Esta decisión, comunicada este lunes, entrará en vigor a partir del 7 de mayo de 2024.

El anuncio de la Comisión Europea se produce después de que AstraZeneca solicitara la retirada de su vacuna el pasado 5 de marzo, aunque la decisión de suspender su comercialización se tomó recién dos meses después. Esta medida implica que la vacuna ya no estará autorizada en la Unión Europea a partir del próximo martes.

Este movimiento coincide con la admisión por parte de AstraZeneca ante el Tribunal Superior de Reino Unido de que su vacuna contra el COVID-19 puede provocar trombosis en casos excepcionales. Esta admisión ha alimentado una demanda colectiva en la que la farmacéutica podría enfrentarse a una indemnización de hasta 100 millones de libras debido a varios casos de muertes y lesiones graves relacionadas con su vacuna.

En España, la Audiencia Nacional admitió en febrero la reclamación de un ciudadano que sufrió graves efectos secundarios después de recibir la vacuna de AstraZeneca. Esta decisión abrió la puerta a nuevas reclamaciones de miles de ciudadanos afectados por las vacunas. Se estima que alrededor de 68,8 millones de dosis de la vacuna Vaxzevria se han administrado en Europa a ciudadanos mayores de 18 años.

A pesar de la suspensión de la comercialización, AstraZeneca ha expresado su orgullo por el papel que desempeñó su vacuna en la lucha contra la pandemia. La compañía señala que se salvaron más de 6,5 millones de vidas en el primer año de uso y se suministraron más de 3.000 millones de dosis en todo el mundo. Sin embargo, con la disponibilidad de otras vacunas actualizadas y un excedente de suministros, la demanda de Vaxzevria ha disminuido, lo que ha llevado a esta decisión de suspensión de la comercialización. AstraZeneca afirma que trabajará con los reguladores y sus socios para definir el camino a seguir y concluir su contribución a la pandemia de COVID-19.