07.05.2024 |
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RACING 1-0 GRANDA

La salvación, cada vez más cerca para el Racing

Cada vez más cerca. Así es como tiene el Racing de Santander la salvación en Segunda División gracias a una victoria por la mínima ante el Granada.

Íñigo Sainz-Maza abandonando el campo tras su expulsión. / LALIGA
Roko Baturina celebra el tanto de la victoria. / LALIGA
La salvación, cada vez más cerca para el Racing


Un golazo de Roko Baturina al comienzo de la segunda parte es el culpable de que los verdiblancos luzcan una sonrisa y de que tengan más esperanzas para cumplir el objetivo de el equipo se asiente en el fútbol profesional.

La grada, una vez más, volvió a ser el jugador número doce en El Sardinero y llevó al Racing en volandas desde antes incluso del comienzo del partido, porque los aficionados recibieron al bus con bengalas, cánticos, bufandas y banderas. El partido contra el Granada era una final, y así se vivió durante toda la semana.

Yendo al prado, el Racing terminó la primera parte empatando a cero contra el Granada, un equipo que se sitúa en los puestos del Olimpo de la segunda división del fútbol nacional y que tiene grandes aspiraciones por ascender y competir contra los mejores.

Una primera parte que ha estado marcada, porque ambos equipos han tenido el dominio del encuentro y del cuero, pero de manera alternada. Es decir, los primeros compases el Granada poseía la bola y generaba más peligro, para luego ceder el testigo de la intensidad al Racing.

Cada vez más cerca

Ambos conjuntos se turnaban el protagonismo en el partido, como si ninguno de los dos quisiera tener la batuta sobre la música que sonaba en el tapete de El Sardinero. Cuando uno de los dos estaba ofensivo, pasaban tres jugadas y las pulsaciones bajaban de golpe.

Es entonces cuando el rival reacciona y sale de esa parada cardíaca en la que se encontraba el partido.
Los primeros 45 minutos finalizaron con un empate justo y sin goles que celebrar, o que lamentar.

No ha sido cerrado, sino que, tanto Granada como Racing, han intentado jugar sus cartas y sorprender al adversario. Objetivamente, y siendo realistas, firmar un empate ante el conjunto de La Alhambra es para celebrarlo. Dado el puesto que ocupa el Granada y los otros resultados de los equipos directos para la salvación en segunda, las tablas en El Sardinero sería la mejor opción.

Lógico está, poder ganar y sumar los tres puntos, pero eso es una hazaña más difícil que se tendría que pugnar en la segunda parte.

Con la lluvia como protagonista de la tarde, Jokin Ezkieta se ha estrenado en casa. Tras la expulsión de Parera en Zaragoza, llegó la oportunidad del portero navarro.

El de Pamplona hizo buenas paradas en la capital de Aragón, pese al resultado final de 4-1, y el partido de ayer ha servido para demostrarle a José Alberto de lo que es capaz de hacer. También quien

ha tenido minutos ha sido Peque, que ha jugado un buen partido y ha sido una de las referencias ofensivas del Racing en la primera parte. Otro jugador que el partido contra el Granada puede suponer un antes y un después en su participación en el equipo.

Los pocos minutos que le ha dado el técnico racinguista lo ha hecho bien, ayer tuvo la ocasión perfecta para tener más protagonismo y galones dentro del vestuario.

A los cuatro minutos de comenzar la segunda parte Vicente perdona y por medio metro no puede abrir la lata para los cántabros. Buen comienzo del segundo round, donde el Racing, lejos de esconderse, planta cara a uno de los gallos de la categoría.

Gol de Baturina

Lo de Vicente fue un aviso, porque después Baturina vuelve a rugir y adelanta al Racing. El pívot croata se hace grande en el área. El gol nace con la asistencia del mago de Derio a Roko, que en el punto de penalti controla el balón, se clava en el punto, da media vuelta, dispara y para dentro. Golazo de killer.

El ya mítico ‘Roko Baturina lolololo’ retumba en el Huerto del Francés. La afición aprieta en la grada, y el equipo responde en el campo. Una auténtica, y efectiva, comunión entre hinchada y los once jugadores que portan la verdiblanca.

Se pone el encuentro de cara para los cántabros. Las bufandas y las banderas tocan el cielo de Santander y el ‘Vamos, dale Racing, vamos campeón’ resuena entre las cuatro esquinas del feudo montañés, todo ello al ritmo de las palmas norteñas.

El gol en contra hace despertar al Granada y fueron conquistando espacio a los santanderinos. Un momento peligroso, porque los andaluces tienen mucha pólvora arriba y cualquier mínima chispa puede hacer explotar el partido.

Y las ocasiones seguían y seguían. Cómo en cuentagotas iban cayendo jugadas contra la portería de Ezkieta, con el miedo de que alguna de ellas acabara con el balón entre los tres palos.

El Racing estaba necesitado de volver a coger la dirección del encuentro, calmar el partido y llevarlo a su juego. No tiene que dar juego al Granada ni que se sientan cómodos, porque el tanto de los rojiblancos estaría más cerca.

Y para ello, José Alberto coge la tiza y empieza a manejar un nuevo esquema en su pizarra. Doble cambio dentro de las filas verdiblancas. Entran al tapete Sangalli y Matheus para dar un aire nuevo a la delantera.

Sumar de tres

Salen del campo Peque y Baturina y El Sardinero ovaciona a los dos jugadores, que han disputado un gran encuentro. Buen partido de ambos. Aprovechan los minutos y los partidos, se machacan tanto defendiendo como atacando y son generosos en las ayudas a sus compañeros; poco más puede pedir un entrenador.

El fútbol continúa en Los Campos, mientras que el Racing sigue aguantando el marcador y el Granada está intentando cambiarlo por todos los medios. Ambos tienen objetivos muy marcados, pero son opuestos. Uno pelea por abandonar la categoría y el otro ansía quedarse en ella.

Nervios en los últimos minutos del partido, y más con seis de añadidos. La afición pita exigiendo el fin del encuentro y el árbitro se el remolón para concluir la cita.

Finalmente, el Racing ha conseguido tres puntazos en su casa, que sirven para coger oxígeno y mirar todavía más lejos los puestos de descenso a Primera RFEF.

‘Cómo no te voy a querer si te vi subir de Segunda B’ canta la parroquia verdiblanca al terminar el partido. La alegría rebosa en El Sardinero y la afición va a su casa con una sonrisa en la boca y con la mentalidad de que sí, de que es posible mantener la categoría.

Toca seguir navegando contra viento y manera, pero, esta vez, con la ilusión de que ‘El Derrepentillo’ lo tiene cada vez más cerca.

La salvación, cada vez más cerca para el Racing
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