El próximo día 23 se cumplen 110 años del primer partido que disputó el Racing, aquel encuentro contra el Strong cuyos protagonistas no eran conscientes aún de la historia que estaban comenzando a escribir. Para conmemorar semejante aniversario y celebrar que el club aún sigue vivo, la Asociación de Peñas Racinguistas (APR) lleva tiempo trabajando en organizar una buena fiesta el sábado día 25, pero el plan que sus organizadores tenían en la cabeza se ha venido abajo cuando La Liga dio a conocer a principios de esta semana el horario del encuentro que corresponde jugar en esa fecha señalada. Será a una mala hora, una hora que obliga a recoger con prisas la comida que centra todo acontecimiento festivo y que, para colmo, impide las sobremesas: a las cuatro y cuarto de la tarde. Va a tocar rehacerlo todo.

Hace ya varios meses que, a petición de las peñas, el Racing solicitó formalmente a La Liga que pusiera el sábado 25 a las seis y media de la tarde el partido contra el Andorra en El Sardinero que correspondía jugar el fin de semana posterior al cumpleaños. Es el horario perfecto para comenzar la fiesta a mediodía, disfrutar de unas buenas raciones de cocido y, poco a poco, ir en procesión hasta Los Campos de Sport. Sin embargo, el organismo que preside Javier Tebas no ha tenido el tacto de conceder el deseo. Sí ha fijado el encuentro en sábado, pero no a una buena hora, sino, probablemente, a la peor de todas.

Lo curioso es que ese día a las seis y media de la tarde o a una franja horaria similar no hay partido de Segunda División. Y el secreto está en que a esa misma hora se disputa el derbi madrileño entre el Real Madrid y el Atlético de Madrid. Y La Liga entiende que todo aficionado al fútbol tiene que estar centrado en ese gran acontecimiento que incluso conseguirá que la Tierra deje de girar sobre sí misma. No quiere que haya más partido ni en Primera ni en Segunda que pueda desviar la atención o que pueda ser competencia para la cita estelar y por eso no ha podido conceder al Racing su deseo.

Es la respuesta que ha recibido el propio club cántabro cuando, ayer por la mañana, se puso en contacto con La Liga para tratar de solventar el problema que se puede generar con el horario. Les dijeron que imposible, que a las seis y media no podía ser por el motivo señalado en el párrafo anterior. Ante esto, el siguiente movimiento ha sido solicitar jugar a las nueve de la noche en lugar de las cuatro y cuarto. Y ahora toca esperar una respuesta. El primer paso es conseguir que Sporting y Tenerife por un lado o Mirandés y Leganés por otro acepten cambiar su horario por el del Racing - Andorra. En principio, no debería haber problema en ese sentido.

Lo sucedido ha cogido con el pie cambiado a la APR porque ya tenía todo programado y pensado con la idea de que La Liga permitiría que el encuentro contra el conjunto andorrano fuera a la hora solicitada. Entendían que los extraños horarios que han puesto al Racing en las últimas semanas, en las que tuvo que recibir al Tenerife un viernes por la noche y hará lo propio con el Leganés un lunes también a las nueve, iba encaminado a compensar la concesión de ese favor solicitado, pero no ha sido así.

La directiva de la APR tenía (y tiene) hoy una reunión con la concejala de barrios para terminar de cerrar lo necesario con vistas a la normal celebración de la fiesta, pero apenas se van a poder cerrar los diferentes eventos porque estarán a la espera de una respuesta por parte de La Liga a la solicitud de cambiar el partido a las nueve de la noche en el caso de que insistan en no permitir jugar a las seis o seis y media. Sin conocer el horario definitiva, no se puede desarrollar un programa de festejos que gira en torno al partido.

De todas maneras, ya quede fijado definitivamente el partido a las cuatro y cuarto o a las nueve de la noche, lo que aseguran desde la APR es que va a haber fiesta. De hecho, están trabajando en un plan B o incluso un plan C. Asumen que, de conseguir que al menos se alargue el encuentro al horario nocturno, habrá que sumar algún evento más al programa de festejos para que no se haga demasiado larga la tarde. Lo que es indiscutible es que es una faena no poder contar con la posibilidad de disfrutar del partido a media tarde para que todo fuera más rodado. Hace diez años se encontraron los peñistas (y entonces también Aupa) la oposición de Harry, quien manejaba los hilos y los suyos y ahora con la obligación de vivir al máximo un Ral Madrid - Atlético de Madrid.

Los abonados disponen de entradas a precio reducido

Antes de recibir al Andorra y celebrar ese día los 110 años de historia del Racing, toca hacer lo propio con el Leganés. No sólo es un duro rival que mira directamente hacia el ascenso, sino que La Liga ha fijado el partido un lunes por la noche con todo lo que eso supone. Dificulta la asistencia de multitud de aficionados comenzando por los más pequeños, ya que se les hace muy tarde, continuando con los de fuera de Santander, ya que les hace volver muy tarde a casa, y terminando con los que madrugan. El club es consciente de que, en condiciones normales, será muy complicado que la grada de Los Campos de Sport presente un buen aspecto y, para ayudar en lo posible a que los jugadores estén bien arropados, ha decidido lanzar de nuevo una campaña a partir de la cual los abonados de la presente temporada podrán adquirir entradas extra a un precio reducido.

Es una idea que ya se puso en práctica con éxito en el partido contra el Sporting del mes pasado a pesar de que lo tenía todo a favor para disfrutar del gran ambiente del que gozó el encuentro por el horario, por el rival, por el desplazamiento masivo de la afición visitante (la del Sporting) y por ser, además, el primer partido del año en casa y el primero en más de un mes. En aquella ocasión, incluso se llegó a colgar el no hay billetes. Con vistas al lunes, a buen seguro que el club se conformaría con disfrutar de una entrada similar o sólo poco más baja de lo habitual. De esta manera, los abonados podrán conseguir un máximo de tres localidades a un precio de diez euros para los adultos y cinco para los menores de edad. Serán para la misma zona del graderío al que pertenezca el carné, por lo que la rebaja es considerablemente mayor para quienes acuden a tribuna principal o central, donde las entradas cuestan 30 euros, que para los que van a la preferencia sur o este, donde valen quince. Los interesados pueden hacer uso de la oferta en la web o en las taquillas de diez a cinco hasta el viernes.